EEUU.- Joanna Oltuszewska, una empleada doméstica que ofrecía sus servicios de limpieza en Nueva York, dejó cariacontecidos a sus clientes cuando éstos descubrieron que no acababa con el polvo de sus casas pero sí terminaba con las existencias de alcohol. Al menos tres mujeres denunciaron incidentes y destrozos en sus hogares después de contratar los servicios de Olszewska. Una de ellas hizo públicas las imágenes de la trabajadora después de una de sus fiestas. Nicholas Gomes, otro cliente que contrató sus servicios, afirmó que se la encontró "desnuda de cintura para abajo, recostada en el sofá a punto de dormirse", cuando regresó a su apartamento en Manhattan (Nueva York). Gomes insinuó que la trabajadora, inmigrante de Europa del Este, se emborrachó y vació su botella de brandy. El afectado llegó a un acuerdo con Olszewska para que ésta se declarase culpable y le indemnizará económicamente. La trabajadora abonó una parte y luego desapareció. "Cuando llegué a casa ese día, noté la basura en el pasillo en el piso de mi edificio y olía terriblemente mal ", comentó Jennifer C, otra afectada, al New York Post. "Entré en el apartamento y parecía que no había limpiado nada y se había tomado una botella de vino". Otra pareja denunció en 2017 que la mujer acabó con una botella de whisky y dejó bastantes manchas de sangre y orina por toda la casa.