Un hombre llamado Nathan Reeves perdió su anillo de boda cuando nadaba en Emily Bay (isla Norfolk, Australia) y meses después una buceadora lo encontró ajustado en el cuerpo de un pececillo. A principios de año, Reeves y su esposa, Suzie Quintal, decidieron visitar la isla de Norfolk para ver a su familia. Un día que estaba nadando, el hombre se dio cuenta de que había perdido su anillo. Al enterarse de lo sucedido, los lugareños se unieron para ofrecer ayuda al matrimonio. Se abastecieron de redes, equipos de buceo, detectores de metales y barcos con fondo de cristal para tratar de encontrar el objeto perdido, valorado en unos 1.000 dólares (823 euros). Cinco meses después, una buceadora llamada Susan Prior encontró el anillo alrededor del cuerpo de una lisa (un tipo de pez), por lo que decidió avisar a la pareja. Aunque le preocupó ver así al animal, aclaró que le pareció que estaba bien. “El metal se pudo quitar atrapando el pez con una red y sacándolo suavemente”, precisó.
