María Teresa Campos fue la invitada de Pablo Motos en 'El Hormiguero' este martes, pero su protagonismo fue eclipsado por un joven navarro de Lerín. Ocurrió en el espacio del programa de Antena 3 en el que se regalan 3.000 euros si alguien contesta correctamente a una llamada telefónica aleatoria.

"¿Sabe usted qué es lo que quiero?", era la pregunta que formuló la periodista y presentadora. Al otro lado del teléfono había alguien, pero no pronunciaba palabra. "No es una broma, es María Teresa Campos. Es de Telecinco, pero está ahora en Antena 3", aclaraba Motos.

Por fin se escuchaba una voz: "La tarjeta del Hormiguero". Era la respuesta correcta que hacía acreedor al receptor de un cheque por valor de tres mil euros. Algarabía en el plató. "¿Cómo te llamas?", preguntaba Motos. "Hodei", respondía la voz.

Después de unos segundos de incertidumbre por el silencio y porque el nombre en euskera no era conocido a oídos de los presentadores, volvía a intervenir Pablo Motos: "Creo que no te estás creyendo que te estamos llamando de la tele". "Pues no mucho", respondía Hodei. "¿Por qué no lo crees?", decía María Teresa. "No sé si te suena un poquillo mi voz o algo", recalcaba la presentadora nacida en Tetúan pero malagueña de toda la vida, incidiendo en que llevaba muchos años en radio y televisión.

"¿Has puesto la tele?", insistió Motos. "Pues sí, por siaca", manifestaba un silencioso Hodei.

"¿Pero no te notas un poco de alegría?". "Pues tampoco", fue la inesperada respuesta.

En el plató no daban crédito a la indiferencia del ganador. "Está bien, Hodei, igual tienes algún problema y no te compensa ganar 3.000 euros, eso lo entenderíamos, es perfectamente comprensible".

"Hombre, bienvenido sea", replicaba el navarro, dejando todavía más desconcertadas a personas y hormigas.

"Hodei, no te quiero imaginar a ti de fiesta", intervenía de nuevo Motos. "A mí, pues la verdad que no". "¿De dónde eres?". En ese momento es cuando Hodei revelaba que es de Lerín, Navarra.

"¿Tienes algún plan para los 3.000 euros o los vas a dejar en la mesa del comedor?", consultaba el presentador valenciano. La respuesta desató las risas por doquier: "Para multas". Trancas y Barrancas entendía ahora la falta de entusiamo: "Claro, según entra el dinero sale". "A este le ponen frito a multas", interrumpía Motos.

"Es que me pesa el pie", replicaba el lerinés, que en cualquier caso precisaba que "bah, ahora ya no mucho".

La intervención del navarro apenas duró unos minutos, pero dejó huella en la audiencia y en las redes. "Qué pena que no podamos charlar más rato, me lo estoy pasando en grande. Que lo disfrutes como todo lo que haces", se despedía Motos.

"¿Pues muchas gracias, no?". Un carácter realmente único.