ciudad del vaticano - La Guardia Suiza, el ejército más pequeño y más antiguo del mundo que tiene como misión proteger al Papa, se adapta a los tiempos y sustituirá el pesado casco de hierro por uno en ligero en plástico PVC elaborado con una impresora 3D. El nuevo complemento fue presentado con ocasión del tradicional juramento de hoy de 32 nuevos reclutas y que se celebra cada 6 de mayo en conmemoración del llamado Saqueo de Roma (1527), en el que murieron 147 guardias suizos cuando defendían al papa Clemente VI del asalto de las tropas del emperador español Carlos V. Respecto al casco, además de ser más ligero, cuesta la mitad (unos 880 euros) y se ha incluido el escudo del papa Julio II, que fundó la guardia Suiza y que hasta ahora no figuraba. Las impresoras 3D utilizadas tardan cerca de 14 horas en acabar cada uno de los objetos. A pesar de que son mucho más económicos, el general de la Guardia Suiza, Christoph Graf, explicó que están buscando patrocinadores para que el gasto no pese a las finanzas de la Santa Sede. Además, ante las nuevas necesidades de seguridad, el pequeño ejercito pasará de 110 a 135 integrantes. La Guardia Suiza fue creada en 1506 cuando el papa Julio II negoció con los cantones helvéticos el envío de voluntarios para conformar una escolta personal y de su residencia en Roma. Durante la ceremonia de hoy, los nuevos reclutas jurarán fidelidad al Papa alzando tres dedos de la mano derecha para simbolizar la Trinidad.