santander - Apenas doce días han sido los que Ruth Beitia, la mejor atleta española, ha durado en la primera línea de la política, desde que el pasado 10 de enero el presidente del PP, Pablo Casado, la presentara como candidata a la Presidencia de Cantabria hasta que ayer comunicara que renuncia, “por razones personales y familiares”, a esa responsabilidad, donde será sustituida por María José Sáenz de Buruaga, presidenta del PP de Cantabria. Concretamente, Beitia rechaza encabezar la candidatura de los conservadores a la Presidencia de Cantabria, la Secretaría de Deportes y su puesto en la Ejecutiva Nacional del PP, así como su escaño en el Parlamento regional, al que accedió la pasada legislatura, en 2011.

En un comunicado, el PP confirmó los rumores que comenzaron a oírse al día siguiente de ser presentada “en sociedad” como candidata, en su primera intervención pública, donde equiparó el maltrato animal con la violencia machista, declaraciones que ratificó a las pocas horas, porque se había expresado mal. Posteriormente, la atleta guardó silencio durante una semana y reapareció el viernes 18 en Madrid, en la Convención Nacional del PP, donde intervino -durante apenas dos minutos y medio- junto al resto de candidatos autonómicos del partido y se centró en el deporte y los beneficios que conlleva su práctica.

En su renuncia, la campeona olímpica agradeció el respaldo recibido por el líder estatal, por haber depositado su “confianza” en ella durante algo más de diez años de actividad política, a la que se incorporó en 2008 de la mano del expresidente del partido y de Cantabria, Ignacio Diego. - Efe