londres - La Cámara de los Comunes de Reino Unido aprobó ayer por una amplia mayoría el plan de la primera ministra, Theresa May, de pedir una segunda prórroga del brexit, un día antes del Consejo Europeo en el que los jefes de Estado y Gobierno de los Veintisiete valorarán la petición británica.

Los diputados respaldaron la hoja de ruta de May por 420 votos a favor y 110 en contra. El Gobierno estaba obligado a someter su plan a Westminster después de que el lunes sus señorías aprobaran una ley que les da el poder de supervisar y hacer cambios.

May recibió este espaldarazo parlamentario -uno de los pocos que puede contar desde que comenzó el proceso del brexit- en el continente, donde ayer se reunió con la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Emmanuel Macron, para ganar adeptos.

Merkel se mostró partidaria de la alternativa propuesta por Tusk, que plantea una prórroga “flexible” hasta final de marzo de 2020, con la posibilidad de que el divorcio se produzca antes si Reino Unido arregla sus asuntos internos, la ya conocida como flextensión.

Posteriormente, May embarcó rumbo a París para verse con Macron, a quien pidió igualmente que apoye su plan y puso al tanto de sus negociaciones con la oposición laborista para superar la crisis política en torno al brexit. “También hablaron sobre las próximas elecciones al Parlamento Europeo y la primera ministra le dijo que el Gobierno está trabajando muy duro para evitar que Reino Unido tenga que participar en las mismas”.

Horas antes, el primer ministro de Irlanda, Leo Varadkar, declaró en el Parlamento irlandés que Macron “está abierto” a una segunda prórroga, si bien “quiere saber con qué condiciones” se concede, “particularmente sobre la implicación de Reino Unido en la toma de decisiones futuras”.

“En el caso de que haya una extensión larga, un año sería demasiado largo para nosotros”, ha dicho una fuente del Palacio del Elíseo a Reuters, descartando así la propuesta de Tusk. - E.P.