pamplona - Tras el preacuerdo a cuatro bandas en Navarra para intentar una investidura de María Chivite, y en plena jornada inaugural de los Sanfermines, la derecha española cargó duramente contra el PSOE y su líder Pedro Sánchez por llegar a pactos con nacionalistas y depender de una abstención de EH Bildu para establecer un Gobierno autonómico. De esta forma, en el PP acusaron a los socialistas de seguir “blanqueando” a los de Arnaldo Otegi, mientras que Ciudadanos los acusó de “traicionar el constitucionalismo”.

El líder del PP, Pablo Casado, advirtió así al presidente del Gobierno en funciones de que si no opta por facilitar un Ejecutivo “constitucionalista” en la Comunidad Foral, estará eligiendo la conformación de un “Gobierno Frankestein” y seguir “blanqueando” a EH Bildu. El líder popular comparó la posibilidad de un acuerdo entre PSN y Geroa Bai con el apoyo de los independentistas catalanes que Pedro Sánchez recibió en la moción de censura de junio de 2018.

En un mensaje en su cuenta de Twitter, Casado exigió a Sánchez que paralice el pacto alcanzado por los socialistas navarros para que su secretaria general, María Chivite, gobierne la Comunidad Foral de la mano de los nacionalistas de Geroa Bai, y de Podemos e Izquierda-Ezkerra (I-E), una fórmula que precisa sí o sí la abstención de EH Bildu. “El PSOE pretende entregar Navarra al anexionismo de los herederos de Batasuna. Sánchez aún puede dejar gobernar a los constitucionalistas y recibir el apoyo de Navarra Suma en su investidura. Si no, es porque prefiere reeditar el gobierno Frankenstein y seguir blanqueando a Bildu”, advirtió el líder del PP en su mensaje en la red social.

El preacuerdo a cuatro bandas firmado el pasado viernes no suma en una sesión de investidura si no cuenta con al menos la abstención de la coalición independentista, lo que está siendo utilizado como arma arrojadiza en la derecha para atacar a Pedro Sánchez. La alternativa que defiende Casado es que Navarra Suma -que integra a UPN, PP y Ciudadanos y que ganó las elecciones autonómicas con 20 escaños- se haga con el poder con la abstención del PSN, lo que, de paso, permitiría a Sánchez contar con el apoyo de los dos diputados de la coalición navarra en el Congreso con vistas a la investidura. Por su parte, el líder de UPN, Javier Esparza, incluso ha ofrecido a los socialistas navarros un Ejecutivo regional de coalición con María Chivite como vicepresidenta.

CS acusa a sánchez de “traición” Chivite, por el momento, resiste las presiones que le llegan desde ámbitos estatales y parece contar con el aval de Ferraz para seguir adelante y conformar un Gobierno a cuatro bandas encabezado por el PSN. Sin embargo, las acometidas contra el PSOE siguen llegando y ayer también Ciudadanos aprovechó para cargar con todo contra los socialistas. La portavoz de la formación naranja en Catalunya, Lorena Roldán, los acusó de “incorregibles” y aseguró que el partido de Pedro Sánchez “ha traicionado al constitucionalismo” por el preacuerdo a cuatro bandas.

“Un PSOE que prefiere formar Gobierno con nacionalistas, con batasunos y con populistas en lugar de dejar que Navarra Suma forme un gobierno constitucionalista”, dijo en referencia al PSOE.

Por todo ello, la dirigente naranja rechazó de plano que su partido pueda llegar a acuerdos con el PSOE a nivel nacional, o facilitar una investidura de Sánchez: “Es imposible que nosotros alcancemos ningún acuerdo con el partido socialista de Pedro Sánchez porque su único principio es romper la unidad y la igualdad de todos los españoles pactando con el nacionalismo simplemente para seguir conservando el poder”.

Las palabras de ayer de la derecha española muestran una actitud a la desesperada al verse ya fuera del próximo Ejecutivo navarro. Lo evidenció esta misma semana el líder de UPN, Javier Esparza, acudiendo a Madrid y reuniéndose con Pablo Casado y Albert Rivera por separado en un intento de mantener el foco mediático en la Comunidad Foral. En esa línea también han ido los ofrecimientos de los dos diputados de UPN a Pedro Sánchez para la investidura. Sin embargo, todo apunta a que la derecha va a quedarse una legislatura más en la oposición en Navarra.