pamplona - “El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el de la Generalitat, Quim Torra, se comprometió ayer a poner en marcha este mes la mesa de diálogo entre Gobiernos y serán ellos dos quienes la encabecen y carecerá de la figura de un mediador. Sánchez y Torra se reunieron en el Palau de la Generalitat durante una hora y media en este primer encuentro tras más de un año, en el que acordaron la constitución de la mesa y coincidieron en su compromiso de que el diálogo eche a andar, pese a admitir lo alejados que siguen sus planteamientos sobre Catalunya.

De autodeterminación y presos políticos quiere hablar Torra en esa mesa, mientras Sánchez apuesta por mejorar el autogobierno. Una muestra, señalaba el presidente del Gobierno, de lo dispares que son las posiciones de ambos. Sánchez, además, llevó a la reunión un documento de 44 puntos con el que el Gobierno ha tratado de dar respuesta a las demandas que a lo largo de los años han hecho los últimos tres presidentes de la Generalitat -Artur Mas, Carles Puigdemont y Quim Torra- y con la promesa de más partidas en los Presupuestos para Catalunya. Pero Torra insistió en que las cuestiones de ese documento que no hablen del conflicto catalán -las más sectoriales- se traten en la Comisión Bilateral Gobierno-Generalitat, que también se celebrará este mes de febrero o incluso podrían resolverse, en su opinión, “en un solo Consejo de Ministros”.

sin ganador La diferencia de tono entre los dos presidentes quedó patente en la rueda de prensa posterior a la reunión. Sánchez era todo optimismo y buenas palabras, mientras Torra se mostraba mucho más escéptico. El presidente subrayó que había comenzado una nueva etapa, la de la búsqueda del “reencuentro”, e insistió en la disposición de ambas partes por poner en marcha un diálogo “honesto, abierto y respetuoso” tras una década de desencuentro y conflictos que ha dado un “balance lamentable”. “Nadie ha ganado y todos hemos perdido” en este tiempo, insistió el jefe del Ejecutivo, quien pidió “generosidad, paciencia y determinación” ante este diálogo que, como reconoció, no será nada fácil.

Fue Sánchez el que confirmó que la mesa de diálogo entre gobiernos no tendrá mediador, como reclamaba parte del independentismo. Porque mientras ERC no explicita ahora que el mediador sea una condición para este diálogo, JxCat sí lo había puesto sobre la mesa: en los últimos días la propia consellera de la Presidencia, Meritxell Budó, lo planteaba como una “garantía” necesaria. “El mediador serán los 47 millones de españoles”, que serán “testigos” de dicho diálogo “sincero, franco y transparente”, dijo Pedro Sánchez descartando así esta figura para la mesa. Y admitió por otro lado que seguirá habiendo sectores contrarios al entendimiento con la Generalitat, que seguirán defendiendo “la imposición” como única forma de resolver el conflicto, pero apostó por superar esas resistencias porque son “muchos más”, consideró, los que quieren el entendimiento. “El camino no va a ser fácil, no va a ser rápido hay heridas muy profundas, llevará tiempo y esfuerzo” y todo ello es razón para que comience “cuanto antes”, señaló Sánchez.

Torra, por su parte, pidió evitar generar “falsas expectativas” con la mesa de diálogo entre gobiernos. Pero dejó clara, eso sí, su intención de encabezar junto con Sánchez esta mesa que fue fruto del acuerdo de investidura entre socialistas y ERC y ante la que en un principio Torra y su partido, Junts per Catalunya, se mostraban reacios. Y aunque Sánchez sugería en su comparecencia que estará en la primera reunión de la mesa, Torra, consideró que ambos deben continuar en todos los encuentros que se celebren. Lo contrario, dijo, no contribuirá en el mismo grado a la “resolución del conflicto político” porque carecería del “liderazgo” de “quienes representan a Catalunya y España”.

El president insistió en que la mesa debe abordar dos cuestiones que están en “la raíz del conflicto político”, y que son el “ejercicio del derecho a la autodeterminación” y el “fin de la represión”. “Sobre autodeterminación me ha trasladado que ‘autogobierno dentro de la Constitución’ y no he tenido respuesta sobre el fin de la represión”, explicó Torra tras su cita de hora y media con Sánchez, un esperado encuentro que se celebró de manera cordial pese a no se producía desde hace más de un año y al que acudían con el objetivo de sentar las bases de una mesa de diálogo entre gobiernos, una de las condiciones impuestas por el acuerdo entre el PSOE y ERC para investir a Sánchez. - M.G.

El Post-it

Parlamento El pleno del Parlament reclamó ayer con los votos favorables de las fuerzas independentistas y la abstención de los comunes que en la mesa de diálogo entre los gobiernos central y catalán se cuente con un “mediador internacional” que “vele por el cumplimiento de los acuerdos”. Así lo pedía un punto de una moción presentada por JxCat en la cámara catalana, que en otro apartado y con la misma correlación de fuerzas rechazó la resolución del Tribunal Supremo (TS) que “pretende inhabilitar” al presidente de la Generalitat, Quim Torra, y calificó de “golpe de Estado” lo dictado por la Junta Electoral Central y el TS con relación a esta cuestión. La cámara también pidió promover iniciativas en el marco del Acuerdo Nacional por el ejercicio del derecho a la autodeterminación y la amnistía y que el Govern debe impulsar cuanto antes.