- Compareció la presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite, en la Comisión de régimen Foral acompañada por sus vicepresidentes Javier Remírez y José María Aierdi, y de su asesor Félix Taberna. Se trataba de explicar a petición propia y de EH Bildu, el Plan reactivar Navarra-Nafarroa Suspertu. Chivite pidió a los grupos parlamentarios un “compromiso común” con la implementación “tanto presupuestaria como normativa” de dicho Plan. Durante su comparecencia la presidenta inicidió en bastantes consideraciones que ella misma expuso el pasado 1 de agosto en la presentación del Plan ante los medios de comunicación. Por ejemplo, en cuanto al punto de partida, responder a los problemas sociales “ante el agotamiento que depara el actual modelo”. Y en cuanto al objetivo: “avanzar hacia un nuevo modelo social y económico mediante una Agenda para el Cambio”. La cuestión ahora es pasar de las palabras a los hechos, del relato a la concreción y dotación financiera.

Chivite otorga a este documento rango de agenda para el resto de la legislatura, extensible a una perspectiva temporal más amplia dada su vocación de transformación estructural, para el fortalecimiento de una economía social y sostenible de mercado, “a favor de las personas”.

La presidenta del Ejecutivo foral explicó que durante el mes de agosto los departamentos del Gobierno trabajaron en el desarrollo de las 190 medidas que contempla el plan y avanzó que se trabaja presupuestariamente en ellas. “Nuestra intención es que el anteproyecto de Presupuestos Generales de Navarra para 2021 identifique las partidas afectas al plan desde el desarrollo de las medidas. Y afirmó que en este septiembre se han producido reuniones “al más alto nivel ministerial para presentar el Plan, y para ir acercándonos a lo que va a ser el marco regulatorio europeo y estatal que conllevará las asignaciones del plan de recuperación de la Unión Europea”.

La presidenta conectó Suspertu dentro de las grandes líneas que dibuja la política europea, y dijo que el Ejecutivo foral ya trabaja para “estar preparados para cuando salgan las convocatorias europeas” y presentar proyectos en solitario y con otras regiones. Como ejemplos de objetivos para acceder a fondos europeos, Chivite citó la segunda fase del Canal de Navarra o un Centro de Inteligencia Artificial. “Tenemos que afinar muy bien y tener ambición”, apuntó Chivite, para quien Navarra “está bien posicionada” para acceder a estos fondos, como “una comunidad comprometida con ese modelo innovador y cohesionador en lo económico y lo social, resaltando que el Gobierno ya está trabajando “con la sociedad civil, empresas, innovación, asociaciones y entidades para cooperar en programas susceptibles de ser objeto de esos fondos”. Para Chivite se ha hecho mucho en poco tiempo. La oposición discrepa, y se muestra más o menos escéptica con las posibilidades de recuperación. Y eso que por la mañana el vicepresidente y portavoz Javier Remírez trató en la rueda de prensa posterior a la sesión de Gobierno de inyectar confianza a la ciudadanía sobre la situación de Navarra. “Estamos en un escenario de recuperación” diferente a la “permanente recesión” de hace 10 años, y “en posición de cabeza de las comunidades acerca de la recuperación de la situación pre-Covid”.

Ejército y alternativas. En relación a la petición de que militares colaboren en el rastreo de casos de covid-19, para Chivite “toda ayuda es bienvenida y necesaria en un momento histórico en el que ninguna administración responsable rechazaría recursos que contribuyan a paliar la pandemia y salvar vidas”. Contestaba así a la portavoz de EH Bildu, Bakartxo Ruiz, quien preguntó a la presidenta si, con esta colaboración, que comenzará en el área de Tudela, el Gobierno foral está reconociendo que los recursos para el rastreo “son insuficientes”, “no se están haciendo las cosas como deberían” o “no hay alternativas dentro del personal de la Administración foral”.