La ejecutiva nacional de Ciudadanos (Cs) ha decidido anular el proceso interno para elegir a la junta directiva de la agrupación del partido naranja en Pamplona, después de comprobar que la única candidatura que reunía los requisitos para ser votada era la considerada no oficial.

Sólo dos listas concurrían a liderar la dirección del partido en Iruña, cuya votación se celebró el martes 22 por la tarde. La encabezada por Íñigo Gallego, que contaba con el respaldo del coordinador de Navarra, Carlos Pérez-Nievas; y la liderada por Marlon Urdaneta, en la que figuraba como número tres la senadora Ruth Goñi.

El problema surgió cuando la comisión de garantías se vio en la obligación de retirar la candidatura oficial, al comprobar que no reunía las normas estatutarias internas. En concreto, incumplía el artículo 62, que recoge que debe ser el coordinador quien presente la candidatura en la web del partido.

Excluida, por lo tanto, la lista de Gallego, solo hubo posibilidad de votar a la de Urdaneta. Sin embargo, media hora después de finalizar dicha votación, la dirección nacional de Cs envió un email desde Madrid a toda la afiliación de Pamplona en el que comunicaba que quedaba anulado el proceso para elegir a la dirección del partido en la capital navarra. Argumentaba que se habían publicado las candidaturas "antes de haberse superado el trámite de admisión", lo que a su juicio "altera gravemente, el juego de la competencia electoral". Una decisión que sorprendió a la candidatura no oficial por proceder de quienes previamente habían valido el proceso hasta el punto de que se llegó a votar.

La realidad sin embargo es que Cs está partido por dos en Navarra, con Carlos Pérez-Nievas, que goza del respaldo de la líder nacional, Inés Arrimadas, por un lado y Ruth Goñi, por el otro.Entre ambas facciones existe también una confrontación estratégica, ya que desde el sector de la senadora se sostiene que el partido ha radicalizado su discurso.