- El Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) ha admitido a trámite la cuestión prejudicial planteada por el magistrado del Supremo Pablo Llarena para que determine el alcance de las euroórdenes dictadas contra el expresident Carles Puigdemont y los exconsellers Toni Comín, Clara Ponsatí y Lluis Puig por su rol en el procès. Así se lo ha comunicado el TJUE al Supremo, al tiempo que ha notificado la petición de decisión prejudicial a las partes y a los demás interesados para que hagan las observaciones que consideren oportunas.

No obstante, el TJUE rechaza el procedimiento acelerado, de modo que se hará por la vía ordinaria. La tramitación diferirá así de la usada para la cuestión prejudicial referida al ex vicepresidente catalán Oriol Junqueras, que estaba en prisión cuando se tramitó. Las diferencias esenciales entre ambos procedimientos consiste en que en el acelerado, el plazo para remitir observaciones puede ser inferior a los dos meses que establece el ordinario, aunque no menor de quince días.

El instructor del procès acudió el pasado marzo al TJUE, con el respaldo de la Fiscalía, para que determine las razones por las que se puede emitir y, sobre todo, rechazar una orden de detención y entrega europea (OED), reaccionando así a la decisión del Tribunal de Apelaciones de Bruselas de no enviar a Puig al Estado español.

Llarena pretende que el TJUE arroje luz sobre la Decisión Marco 2002/584/JAI que regula las euroórdenes para que, en base a los criterios fijados por la corte comunitaria, “pueda adoptar una decisión concreta en torno a mantener, retirar o emitir nuevas ODEs respecto de todos o algunos de los copartícipes procesados en esta causa”. De esta forma, busca reactivar un caso que “se encuentra plenamente paralizado” por la situación de rebeldía de los investigados por el hecho de que un Estado miembro ya ha denegado la primera de las euroórdenes dictadas en el marco de esta causa. Aunque Llarena no lo mencionó expresamente al plantear la cuestión prejudicial, otra de las razones de esta parálisis es la inmunidad parlamentaria de Puigdemont, Comín y Ponsatí como miembros de la Eurocámara, si bien el Pleno ya ha dado luz verde al suplicatorio cursado por el TS para retirar dicho blindaje al ex president.

Por otro lado, el juez escocés que examina la euroorden dictada por el Supremo contra Ponsatí ha citado a las partes a una vista el próximo 26 de agosto para decidir si el proceso debe continuar ante la justicia británica, después de que la exconseller haya comunicado su cambio de residencia a Bélgica. Así lo decidió durante una vista celebrada ayer tras varios aplazamientos en los últimos meses a la espera de que el Parlamento Europeo se pronunciara sobre la inmunidad de la eurodiputada.