PAMPLONA - Un estudio del Gobierno de Navarra concluyó que el 71,53% del agua que consumía Cadreita se consideraba que tenía un uso “incontrolado”, es decir, que se perdía en fugas, en consumos no registrados por fraude o por autoconsumos municipales o de otro tipo que no se controlaban. Fue la puntilla que llevó al actual Ayuntamiento de Cadreita a intentar descubrir qué estaba pasando con su abastecimiento de agua y a tener la certeza de que alguien se la estaba robando y causando un perjuicio estimado de 350.000 euros anuales.

Bajo el título Abastecimiento de agua para uso urbano e industrial en la Ribera de Navarra. Diagnóstico de la situación actual en diciembre de 2016, el estudio del Gobierno de Navarra determinó que de los 653.142 metros cúbicos que consumía Cadreita al año, 467.179 se perdían o no se registraban, lo que significaba 614,7 litros por habitante y día. El propio Gobierno de Navarra recomendó a Cadreita en 2017 que contratara una empresa externa para controlar de manera más eficiente la gestión del abastecimiento de agua y el Consistorio también puso en marcha un plan de detección de fugas.

Después de todas las medidas adoptadas, el desfase entre el agua comprada por el municipio y el agua efectivamente cobrada seguía siendo superior al 50%, de modo que los técnicos concluyeron que la única respuesta al misterio era que alguien estaba sustrayendo el agua del abastecimiento público, por lo que en verano de 2018 el Ayuntamiento presentó la denuncia ante la Guardia Civil. - J.M.S.