PAMPLONA - Un total de 53 denuncias por desaparición de personas adultas se mantienen abiertas en Navarra, donde también se encuentran activas 36 denuncias por la desaparición de menores. Así se desprende del cuarto informe de las personas desaparecidas sin causa aparente en España en 2019, en el que consta que en el conjunto del Estado son buscadas 5.529 personas, de las que la mitad son menores, según la información de la Policía Nacional, Guardia Civil, Mossos d’Esquadra, Ertzainza y Policía Foral.

Desde la creación en 2010 de la base de datos de desaparecidos había registradas, a 31 de diciembre pasado, un total de 202.529 denuncias por desapariciones, de las que 135.353 fueron de menores frente a las más de 66.700 de mayores de edad, informó ayer el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, después de dar a conocer la situación a representantes de asociaciones como SOS Desaparecidas, Inter SOS, QSD Global y Fundación Anar. La radiografía presentada incorpora como novedad el dato de la reincidencia, pues el total de denuncias corresponden a 121.113 personas. De ellas 23.468 desaparecen en dos o más ocasiones.

Además de ese total de 202.529 denuncias, el informe concluye que continúan activas 5.529 casos, es decir, las fuerzas de seguridad tienen abiertas ese número de investigaciones por desapariciones y, de ellas, poco más de un 51% (2.839 casos) son de personas que en el momento de la denuncia eran menores; en 181 casos, por debajo de los 13 años. En el caso de Navarra, son 53 las denuncias que se refieren a personas adultas que permanecen abiertas, mientras que se registran otras 36 denuncias referentes a la desaparición de menores.

En el grupo de desapariciones de menores destacan las ausencias voluntarias protagonizadas por menores extranjeros o nacionales fugados de centros tutelados, que ascienden desde 2010 a 1.059 en el conjunto del Estado, y que se corresponden en los tres últimos años con la mayor afluencia de inmigración.

Respecto a este colectivo de menores extranjeros tutelados, el informe dedica un apartado especial en el que detalla que se han registrado 40.918 denuncias, lo que supone más del 20% del total. De ellas, un 76,56% han cesado, es decir, la persona ha sido localizada o se ha reintegrado en el centro del que se fugó; un 20,85% han pasado al estado “cesado-latente” (el menor ya ha cumplido la mayoría de edad o se ha cesado su tutela legal); y un 2,59% continúan activas. También referidas a menores están los denominados “secuestros parentales”, que desde 2010 ascienden a 369 casos.

En general y según las conclusiones de este cuarto informe, nueve de cada diez denuncias son por desapariciones voluntarias, en tanto que un 7% corresponden a las involuntarias. Las forzosas son el 1% del total. El 58% de las denuncias corresponde a hombres y un 45% a mujeres, si bien la proporción de varones es tres veces mayor a la de mujeres si se tienen en cuenta solo los casos activos.

Solo en 2019 hubo 26.356 denuncias, lo que supone un 11,55% menos que en 2018 y activas permanecían 2.451 a 31 de diciembre. En relación con la duración de las desapariciones, la muestra de 2019 indica que el 64% se cesan en el plazo de una semana; un 74% en dos semanas; un 82 en un mes; y el 8% se prolongan más de seis meses. Y únicamente el 1,54% de las desapariciones cesadas tiene un fatal desenlace, bien por muerte natural (22%), accidente (17%), suicidio (43%) u otra causa violenta (8%).

la cifra

90%

DESAPARICIONES VOLUNTARIAS

El cuarto informe de las personas desaparecidas sin causa aparente, elaborado por la Secretaría de Estado de Seguridad, refleja que nueve de cada diez denuncias son por desapariciones voluntarias, en tanto que un 7% corresponden a las involuntarias. Las forzosas son el 1% del total.