- Los sindicatos ELA, UGT, CCOO y LAB han alcanzado un preacuerdo para el V Convenio de los Centros Concertados para la Atención a la Discapacidad hasta 2023. Después de un año “muy complicado” para la negociación por la pandemia, señalaron los sindicatos, se ha podido llegar a un preacuerdo “en un tiempo récord” en comparación con convenios anteriores que “exigieron años de lucha y movilizaciones”. Las organizaciones destacaron de entre los principales aspectos del preacuerdo el incremento salarial del 2,9% en 2021, y el de los empleados públicos para 2022 y 2023, “garantizando como mínimo el IPC de Navarra”.

El preacuerdo recoge también una reducción de una jornada por turno en 2021, que se sumaría a un día más de vacaciones; el complemento de dedicación sobre el salario real y no sobre las tablas; y la eliminación del arbitraje obligatorio, que pase a ser voluntario. Incluye asimismo que desde enero de 2021 todas las licencias y permisos pasan a ser días laborables y establece una nueva licencia retribuida de hasta 7 horas al año para acompañamiento a médicos de hijos hasta los 3 años de edad. Se amplía además el derecho de excedencia para el cuidado de hijos desde los 3 años hasta los 12.

Para ELA, este preacuerdo “supone un claro avance respecto al convenio anterior”. El sindicato destacó también “la implicación” de la consejería de Derechos Sociales, y subrayó que ha quedado en evidencia que “este servicio debe ser público”.

Por su parte, UGT indicó que el preacuerdo da “estabilidad” a un sector que engloba a casi 2.000 personas y valora las mejoras que se van a introducir y consolidar en convenio, aunque le hubiera gustado un periodo de vigencia mayor.

El sindicato LAB apuntó que es la primera vez que se logra un preacuerdo para el convenio sectorial y cita los “grandes logros” que recoge y que “dignificarán considerablemente” las condiciones de trabajo, así como “el esfuerzo prestado” por el Gobierno foral.

De esta manera, el preacuerdo ha sido posible después de que los sindicatos firmantes hablaran con todos los grupos parlamentarios dado que la patronal, apuntaron, “no ha cedido en nada” y ha sostenido que “no garantizaba nada en la parte económica si no lo asumía el Gobierno de Navarra”. Después de esta ronda de contactos, los sindicatos ajustaron sus reivindicaciones “en una plataforma de mínimos” que remitieron al Ejecutivo, que “respondió que asumiría el coste económico de la mayoría de las solicitudes”.

Tras dos reuniones a tres bandas (Gobierno, patronal y sindicatos) fue posible firmar este preacuerdo en el que los trabajadores tienen “la última palabra”.