A pesar de que el Índice DEC tenga muchas lecturas positivas para Navarra, señala tres aspectos en los que es necesario mejorar mejorar para lograr una mayor nota.
El primero es la ayuda a domicilio para personas mayores de 65 años, cuyo servicio tiene un promedio con 10 horas mensuales, entre las que se incluye el tiempo necesario para tareas y cuidados. Esta cifra representa la mitad de la media estatal, fijada en 20,6 horas. Sin embargo, desde el departamento de Derechos Sociales señalan que la cobertura real es superior a lo que refleja el informe, especialmente tras las ayudas públicas para el cuidado de dependientes concedidas a 1.200 familias en junio del pasado año. Con estas subvenciones, que aportan cada mes desde 224,66 euros para personas con dependencia moderada hasta 356,6 euros para grandes dependientes, se esperan compensar esta prestación.
El segundo de los indicadores con peor nota de la Comunidad Foral es la teleasistencia, con la que cuentan solo el 7% de los mayores de 65 años, tres puntos por debajo del 10,2% de media estatal. Para mejorar estas cifras, el departamento ha presentado a Europa un proyecto de teleasistencia avanzada por valor de 8 millones de euros. Con este importe, pendiente de aprobación, se espera que a finales del año que viene este servicio llegue de forma gratuita a, al menos, todas las personas dependientes con grado reconocido que vivan en su domicilio.
El tercer y último apartado que la Asociación estatal de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales ve necesario desarrollar son los acogimientos familiares a menores, que cuentan con una cobertura del 42,9%, inferior al 50,4% del resto de comunidades. Para ello, Derechos Sociales lleva 3 años lanzando sendas campañas anuales para captar familias y mejorar el porcentaje.
En el caso de lograr un “impulso” en estos déficits señalados y se mantuviera el resto de indicadores, Navarra alcanzaría un “equilibrio completo en la estructura de su Sistema Público de Servicios Sociales”.
