Una fuerte tormenta descargó esta tarde en Tudela y otras localidades de la Ribera. El agua inundó en pocos minutos las calles de la localidad navarra y alcanzó una altura de más de 30 cm de agua, según informó la Policía Foral. Pese a la previsión de tormentas, la lluvia sorprendió a los vecinos y a algunos conductores.
La fuerza del fenómeno meteorológico obligó a actuar a las Policía Municipal de Tudlea, la Junta de Aguas, el cuerpo de Bomberos y la Policía Foral. Todos ellos trabajan en el achicamiento del agua y la organización del tráfico a última hora de la tarde. Fueron notificadas numerosas incidencias.
