El policía nacional destinado en Tudela que fue apaleado el pasado día 12 de octubre en Zaragoza se recupera de las lesiones sufridas en la cara. "Me tienen que operar el lunes. Tengo tres roturas en la mandíbula", explica José Luis Román, secretario del SUP (Sindicato Unificado de Policía) en Tudela, que asegura que cuando se identificó como policía ante su agresor, "cogió aún más furia. No le encuentro explicación a la agresión".

El subinspector que lleva destinado en la capital ribera desde 2014 recuerda que el Día del Pilar se dirigió en su vehículo particular a un supermercado "a comprar algunas cosas que faltaban en casa. Llevaba a mi perro en el coche para darle un paseo". Al llegar a su destino, observó una plaza para aparcar y un hombre en la calzada. "Le pregunté si le importaba subirse a la acera y cuando aparcaba, golpeó el espejo retrovisor y le dio una patada al coche".

"SAQUÉ LA PLACA PARA IDENTIFICARME"

En ese momento, prosigue Román, "me bajé del coche y le pregunté a qué venía su comportamiento. Me respondió que él hacía lo que le daba la gana y me lanzó un puñetazo. Lo paré y saqué la placa para identificarme como policía nacional".

A continución, el hombre, de unos 40 años, "me dio un manotazo en la mano y me tiró la cartera al suelo. Cuando iba a recogerla, me dio un empujón y me tiró al suelo. Entonces me dio un patadón en la cara y empecé a sangrar abundantemente. Los vecinos que había en las inmediaciones me auxiliaron y llamaron a la Policía", relata Román.

LE OPERARÁN EL LUNES

Tras unos días con la cara inflamada, y después de varias pruebas, incluido un TAC, el subinspector ya ha sido citado el próximo lunes para operarse de la mandíbula. "Tengo tres roturas, dos en el lado que me dio la patada y otra en el lado opuesto. No le encuentro una explicación a la agresión", incide. Y añade que ni siquiera cuando se identificó como policía, su agresor dudó. "Cogió más furia", lamenta.