La ciencia no deja de avanzar, y cada vez son más sorprendentes los hitos que se consiguen em prácticamente cualquier ámbito. Uno de los últimos ejemplos es que la empresa Colossal Biosciences ha conseguido "desextinguir" al lobo "terrible", conocido por inspirar al lobo huargo de la Casa Stark en la serie Juego de Tronos.

Colossal Biosciences consigue así traer al mundo a Rómulo y Remo, dos lobos de seis meses que han sido creados mediante modificaciones genéticas a partir de ADN extraído de fósiles que datan de entre 11.500 y 72.000 años. La compañía ha vendido que se trata de la primera "desextinción" concluida con éxito.

Además, la empresa ha compartido en X un video en el que los cachorros aparecen aullando, mostrando así al mundo el resultado de su innovador proyecto.

En la popular serie de ficción, este lobo, que se creía extinto desde hace más de 12.500 años, destaca por su tamaño y su imponente fuerza, lo que lo convierte en el símbolo distintivo de la Casa Stark.

Juego de Tronos: El fenómeno televisivo que conquistó al mundo

Juego de Tronos es una serie de televisión que marcó un antes y un después en la historia de la pequeña pantalla.

Estrenada en 2011 por la cadena HBO y basada en la saga de novelas Canción de Hielo y Fuego de George R.R. Martin, esta épica producción se convirtió rápidamente en un fenómeno global, cautivando a millones de espectadores en todo el mundo.

La trama de Juego de Tronos se desarrolla en los continentes ficticios de Poniente y Essos, donde varias casas nobles compiten por el Trono de Hierro, símbolo del poder absoluto en los Siete Reinos.

Desde el honor de los Stark de Invernalia hasta la ambición de los Lannister y la determinación de Daenerys Targaryen, la serie ofrece un complejo entramado de alianzas, traiciones y conflictos que mantienen al espectador al borde de su asiento.

Daenerys Targaryen E.P.

Ocho temporadas

Uno de los mayores atractivos de la serie es su complejidad narrativa. A lo largo de sus ocho temporadas, Juego de Tronos despliega un entramado coral donde los personajes evolucionan, cambian de bando y sufren consecuencias drásticas, lo que refuerza la imprevisibilidad de la historia. Este enfoque permite explorar temas profundos como el poder, la traición, el honor y la redención.

La serie también destaca por su ambición visual y su alto nivel de producción.

Con localizaciones en lugares tan diversos como Irlanda del Norte, Euskadi, Islandia y Croacia, y efectos visuales que trajeron dragones y batallas épicas a la pantalla, Juego de Tronos elevó el estándar de las series de televisión. No es de extrañar que ganara numerosos premios Emmy, incluyendo Mejor Serie Dramática.

Final criticado

Sin embargo, no todo fue alabanzas. El final de la serie en 2019 generó una gran controversia entre los seguidores, que consideraron que el desenlace no hacía justicia a la rica construcción de personajes que se había tejido durante años.

A pesar de esto, el impacto cultural de Juego de Tronos sigue siendo innegable. Frases como “Winter is Coming” o “Dracarys” han quedado grabadas en la memoria colectiva.