Orcos, elfos, enanos, medianos y otros seres de la Tierra Media llegan a la pequeña pantalla con El Señor de los Anillos: Los Anillos de Poder, un proyecto con una producción digna de cine inspirada en el universo de Tolkien y que aspira a ser la serie del año. Los Anillos de Poder se estrena hoy en Prime Video, rodeada de gran expectación. Cuenta con nueve capítulos -los dos primeros dirigidos por J.A. Bayona- y ninguna cara conocida en el reparto.

Serie de récords

El proyecto ha batido varios récords incluso antes de estrenarse. Es la serie más cara de la historia -1.000 millones de dólares- y la que más efectos especiales tiene. El presupuesto se ha traducido en una sorprendente y cuidada puesta en escena, que incluye grandilocuentes secuencias de guerra, luchas, viajes épicos a través de paisajes de ensueño y escenas de fantasía extraídas del complejo universo de Tolkien. Los productores no han ahorrado en las recreaciones de paisajes, han levantado ciudades completamente nuevas y han diseñado batallas con cientos de personajes. Todo ello acompañado por una fuerte apuesta por el vestuario y maquillaje.

“Todo lo que aparece en la Tierra Media está hecho a mano. Los trajes por ejemplo no están hechos con cremalleras o velcros, o cualquier elemento que esas culturas no tendrían”, señala Lindsay Webber, productora ejecutiva de la serie. Detrás del trabajo de la serie, reconoce, hay cientos de personas y muchos expertos en la obra del escritor, como el nieto del autor, Simon Tolkien, que trabajó codo con codo con los creadores de la serie.

Fiel a Tolkien pero abierta

La trama se sitúa miles de años antes de los libros de El Señor de los Anillos y El Hobbit, en la Segunda Edad. Los showrunners (autores-productores) JD Payne y Patrick McKay, fans de Tolkien desde que tienen recuerdo, han tomado datos de estas historias y de sus apéndices para hilar una trama ambientada en la edad en que se forjan los anillos de la saga y que discurre por la Tierra Media y la isla de Númenor.

El corazón de la trama es fiel a los libros de Tolkien, pero ha habido margen también para diseñar una nueva. La trama de El Señor de los Anillos: Los Anillos de Poder no pertenece a ningún libro de la trilogía. Ambos guionistas construyeron una trama hilando datos extraídos de los apéndices de los libros y datos de las historias de los libros originales. “La oportunidad aquí era poder profundizar en todas estas culturas y estos mundos”, dice Payne. “Fue como encontrar huesos de dinosaurio y comenzar a ponerlos todos juntos”, asegura McKay.

En la primera entrega, el público se adentrará en las minas de Khazad-dûm, llegará en barco al reino de Númenor y conocerá a los pelosos -los ancestros de los “hobbits”-. También buceará en los orígenes de personajes fundamental de la saga como Galadriel, el joven Isildur o Elrond.

La protagonista Galadriel

La elfa Galadriel (Morfydd Clark) encabeza un reparto coral, con una veintena de personajes interpretados por un casting en gran parte desconocido y con una clara apuesta por la diversidad. Muchos personajes son completamente nuevos pero otros son familiares para los fans de Tolkien como el mítico rey Gil Galad, Elrond o Isildur. El personaje del elfo Arondir, por ejemplo, es interpretado por el actor puertorriqueño negro Ismael Cruz Córdova, la princesa Dissa está interpretada por la inglesa Sophia Nomvete, y la reina Miriel cobra vida con Cynthia Addai-Robinson, actriz norteamericana de origen ghanés.

Morfydd Clark, que da vida a la guerrera elfa Galadriel y es una de las protagonistas indiscutibles del proyecto, agradece “el balance” entre los personajes masculinos y femeninos, que están presentes al 50 por ciento. “Hay personajes femeninos increíbles en la saga original”, recuerda.

En los dos primeros capítulos, Galadriel tiene que elegir entre abandonar su búsqueda del villano Sauron o continuar con ella sin ningún apoyo. Mientras, la aparente tranquilidad de la Tierra Media se ve salpicada por la aparición de seres oscuros y la llegada de un misterioso ser desde el cielo. El maquillaje y el vestuario ayudó a Clark a meterse en el papel: “Cuando te ponen las orejas y el pelo, dices vale, ahora me lo creo”. Lo mismo sucedió a sus compañeros Benjamin Walker (Gil-Galad) y Charles Edwards (Celebrimbor). “El vestuario hizo, en mi caso, el 90 por ciento del trabajo. Toda la producción hace que se intensifique tu actuación”, dice Walker. “Cuando te ves en el espejo por primera vez (de elfo), es un momento muy, muy profundo”, según Edwards.

Para fans y recién llegados

No hace falta haber leído la trilogía ni tener conocimiento profundo de orcos, enanos y elfos para ver la serie; tampoco es necesario conocer las películas de Peter Jackson, un trabajo por el que los creadores declaran “respeto”. “Uno de nuestros grandes objetivos era que el proyecto no fuera una obra de teatro nostálgica -destaca Payne-. Si nunca has visto las películas, si nunca has leído los libros, si nunca te has puesto un anillo, el objetivo es que te dejes atrapar por el drama y las emociones de esta historia”. 

Rodada íntegramente en Nueva Zelanda, El Señor de los Anillos: Los Anillos de Poder tiene cinco temporadas firmadas y la segunda está a punto de comenzar su rodaje en Inglaterra.