pamplona. El habitual juego de la competencia entre las cadenas televisivas vuelve a su máximo exponente. El estreno de la serie Hispania de Antena 3 estaba previsto para hoy, pero se ha retrasado hasta el lunes para no coincidir con la miniseria Felipe y Letizia, que Telecinco ha decidido trasladar finalmente a ese mismo día.

El objetivo de las cadenas parece ser programar contra la competencia. Y más cuando se trata de arruinar un estreno del rival. La serie Hispania y la tv movie Felipe y Letizia han sufrido varios retrasos en sus respectivos estrenos por la competencia que mantienen sus cadenas.

Además, Tierra de lobos, otra de las series de la nueva temporada de Telecinco que se emitía los miércoles, desapareció momentaneamente de la programación a la espera de la fecha definitiva para la miniserie sobre los Príncipes de Asturias. Sin embargo, en este caso, la cadena de Fuencarral confirmó ayer por la tarde que esta noche, a las 23.15 horas emitirá un nuevo capítulo -el cuarto- de la serie Tierra de lobos.

El western protagonizado por Álex González y María Castro, entre otros, se mantiene en su día habitual aunque con un horario de inicio retrasado en 45 minutos respecto a las semanas anteriores. Antes, de 22:00 a 23:15 horas, Telecinco ha programado el especial La noche de Felipe y Letizia, un reportaje presentado por Marta Fernández sobre la vida de los Príncipes.

Así, de momento, Tierra de lobos se salva de este enfrentamiento entre las dos cadenas privadas principales del país que han jugado al gato y al ratón. Esta lucha por conseguir la mayor audiencia entre Antena 3 y Telecinco enfrenta esta noche a Tierra de lobos con el desenlace de La Princesa de Éboli.

lucha por la audiencia Los cambios de programación de la serie Hispania y la tv movie Felipe y Letizia comenzaron cuando Telecinco supo que Antena 3 emitiría la ficción basada en el Imperio Romano esta noche. El domingo, Antena 3 reaccionó retirando de su parrilla de esta semana la serie, pero lo hizo dentro del plazo de tres días que permite el ministerio de Industria. El lunes, la cadena aseguró que se emitiría según lo previsto, pero ayer retrasaron el estreno al próximo lunes día 25.

Desde Telecinco aseguran que estos cambios, frecuentes en los inicios de temporada en los que las cadenas apuestan por sus grandes productos, se deben a simples "ajustes de programación". Sin embargo, Antena 3 había promocionado para hoy el estreno de Hispania, que narra la lucha contra los romanos de los rebeldes hispanos encabezados por Viriato en el siglo II a.C. La pelea por cada punto de share se ha reavivado ante la fragmentación en el sector. "Ante cualquier estreno, las cadenas intentan derribarlo con sus mejores productos", explica Ricardo Vaca, presidente de Barlovento Comunicación.

Por su parte, Telecinco anunció poco después que emitiría el esperado estreno de su miniserie para esta misma noche. Esta producción consta de dos capítulos sobre el noviazgo y boda de los Príncipes de Asturias, encarnados por Amaia Salamanca y Fernando Gil.

Por este motivo, fuentes de la cadena de Planeta explicaron que el retraso de Hispania al próximo lunes día 25 es "una respuesta lógica ante esta contraprogramación" por parte de Telecinco.

Antena 3 trata así de "proteger un producto de gran calidad", añadieron las fuentes respecto a su apuesta de la temporada. Se trata de una producción de Bambú que cuenta en su reparto con los actores Roberto Enríquez, Lluís Homar, Ana de Armas y Juan José Ballesta.

El nuevo mapa televisivo ha cambiado los hábitos de los espectadores, que ahora zapean mucho más. "En la situación actual, es más importante que la competencia no consolide programas", comenta Eduardo García Matilla, de Corporación Multimedia, quien señala que Telecinco es la cadena más proclive a esta práctica, "incluso contra canales que no son competencia directa".

Las normas del ministerio de Industria sobre la contraprogramación en televisión dictan que las cadenas tienen que comunicar sus cambios a este departamento con tres días de antelación.

Industria actúa de oficio contra los incumplimientos, y puede imponer multas desde 40.000 hasta 500.000 euros por prácticas de contraprogramación, dependiendo, entre otras cosas, de la repercusión social de los cambios.