Cuenta con un buen número de ingredientes para ser considerada una de las series más esperadas de la temporada. Tiene a los productores de títulos como Big little lies, Nueve perfectos desconocidos o Anatomía de un escándalo. Tiene una historia con ingredientes de drama familiar lleno de secretos. Tiene unos impresionantes parajes naturales australianos. Y para redondear, tiene a una gran intérprete protagonista, Sigourney Weaver.

Además, Las flores perdidas de Alice Hart es la adaptación de la novela homónima que sirvió de debut para Holly Ringland en 2018. Una novela que en muy poco tiempo se convirtió en todo un éxito de ventas recibiendo incluso galardones que la reconocían como el mejor libro del año de ficción.

La sinopsis oficial de Prime Video, que estrena hoy los tres primeros episodios de la serie (después irá llegando uno por semana hasta el 1 de septiembre), relata que “cuando Alice, de 9 años, pierde trágicamente a sus padres en un misterioso incendio, se va a vivir con su abuela June (Sigourney Weaver) a la granja de flores Thornfield, donde se entera de que hay más secretos alrededor de su pasado y el de su familia. Enmarcado en el impresionente paisaje natural de Australia, y con las flores silvestres y plantas autóctonas como unas protagonistas más como medio para expresar lo inexpresable, este apasionante drama familiar abarca varias décadas. A medida que crece, el viaje d eAlice alcanzará un clímax emocional en el que se encontrará luchando por su vida contra el hombre al que ama”.

WEAVER, GARANTÍA 

Actriz y productora, Susan Alexandra Weaver decidió, cuando solamente tenía 14 años, cambiarse el nombre por el de Sigourney después de leer El Gran Gatsby de F. Scott Fitzgerald, en donde aparecía un personaje secundario llamado así.

Sus inicios, ya desde el colegio, estuvieron marcados por el teatro hasta que en 1977 debutó en el cine de la mano de Woody Allen en Annie Hall para, un par de años después, ponerse en la piel de la teniente Ripley de la saga Alien. Por entonces, una crítica decía de ella que era “el hilo que lo mantiene todo unido”. Ahora, en Las flores perdidas de Alice Hart, es la abuela a través de la cual la protagonista irá descubriendo todo lo que su familia esconde.

Tras ser candidata al Oscar a la mejor actriz por Alien, el final de la década de los 80 le deparó dos Globos de Oro por dos de sus mejores papeles. Uno, el de la ejecutiva Katharine Parker en la espléndida comedia Armas de mujer. El otro, el de Diane Fossey en Gorilas en la niebla. Prayers for Bobby, en 2009, le valió nominaciones para el Globo de Oro y el Emmy a la mejor actriz de miniserie o telefilme.