"La endiosada candidata a Eurovisión, que no ha sabido, ni querido, digerir la derrota. La eterna secundona dejó estas declaraciones a las 72 horas de proclamarse ganador Daniel Diges. En la pérdida, se demuestra lo diva que es una, y Coral podría haber felicitado a su compañero, haber hablado desde la humildad o desde el narcisismo, pero con clase".