pamplona. Esto es lo que ha investigado el navarro Félix Tomás López Gurpegui, quien, 500 años después de la edición príncipe de la obra de Andosilla De Superstitionibus, ha decidido recuperar esta personalidad, "olvidada inexplicablemente", a través de una monografía, la primera que se publica sobre él.

En el siglo XVI varios autores escribieron tratados sobre las brujas. Cuatrocientos años después, las obras de muchos de ellos se volvieron a publicar en ediciones comentadas y divulgativas: al catalán Eimerych se le han dedicado dos monografías; al riojano de adopción Castañega, tres; al vasco Vitoria, otras tres; al aragonés Ciruelo, seis. Sin embargo, al navarro Martín de Andosilla no se le ha publicado ninguna. Los excelentes trabajos sobre este autor -que editaron Goñi Gaztambide en 1971, Monteserín en 1988 y Reguera en 1990- quedaron enterrados en importantes revistas, reservados en la práctica a especialistas.

"El principal mérito de Andosilla es que, contra las corrientes dominantes en la época, tanto entre el pueblo como entre gente muy entendida y leída que incitaba a los jueces a condenar a muerte a las brujas, él se mantuvo en las ideas agustinianas de que la brujería era pura imaginación y puro sueño", explicó López.

Así, según el autor, pudo influir en las ideas de algunos jueces, tanto de la Inquisición como del Tribunal de Navarra, de modo que la persecución contra las "pobres sorgiñas" no fuera tan encarnizada, a pesar de episodios como el de Zugarramurdi, en comparación con la que se emprendió contra moros, judíos o protestantes.

Investigar sobre la figura de Andosilla le ha llevado cuatro años a López, los mismos que hace que se jubiló como odontólogo, aunque su ilusión por acercarse a su paisano del siglo XVI se remonta a mucho antes: "Soy del pueblo de Andosilla, y cuando de jovencito leí el apellido de este señor, me entró curiosidad por saber quién era", aclaró.

En cuanto al desconocimiento sobre su obra, de la que ni siquiera Menéndez Pelayo tuvo noticia, López apuntó que son "cosas inexplicables que pasan, ya que cuando su libro se publicó tuvo mucho éxito: se hicieron cinco ediciones en un siglo, aunque todas fuera de España".

Y ese olvido por parte de sus compatriotas se ha perpetuado en la actualidad: "Fuera de nuestras fronteras se han preocupado más por él, ya que la universidad de Pensilvania, en Estados Unidos, tiene en su página web la obra de Andosilla, aunque en latín, y Google Académico ha incorporado a su catálogo la edición completa de París", especificó López. Doble prueba de la importancia que hoy en día conserva Andosilla a nivel mundial, compensando el olvido en que le ha tenido Navarra.

Al escritor navarro, doctor en la Sorbona, se le deben también otros méritos, como ser el historiador y antropólogo que mejor ha dado a conocer los mitos, creencias y tradiciones de la Navarra de hace quinientos años. Además, fue el primer navarro que envió su libro a la imprenta, y el primero que estampó en letras de molde una frase en euskera.