pamplona - Aki Monogatari. El misterio de la gruta amarilla. Es el título de la segunda peripecia protagonizada por este aprendiz de samurai, su maestro, su mejor amigo y un buen número de personajes peculiares que narra el escritor catalán afincado en Pamplona Carlos Bassas del Rey. El autor dará a conocer los detalles de esta novela, que cuenta con ilustraciones originales de Angélica López de la Manzanara, esta tarde, a partir de las 19.00 horas en el Planetario, donde después de las palabras habrá tiempo para las artes marciales.

Con Aki Monogatari y el misterio de los cerezos, publicada en 2013, conocimos a este joven de 14 años -edad que en el Japón del siglo XVII marcaba el paso de la infancia a la edad adulta- que desentraña misterios junto a su maestro y padre adoptivo, Miyamoto, investigador de Asuntos Especiales del clan Date, uno de los más importantes de su tiempo. Junto a ellos, el simpático y glotón Ichiro, el mejor amigo de Aki. Publicada por Quaterni, una de las editoriales más importantes de España en lo referido a temática japonesa, esta aventura muestra a Aki en un momento crucial de su vida. “Va a celebrar su genbuku, la ceremonia de paso a la edad adulta, con lo eso conllevaba en aquella época, y está a punto de vivir en sus carnes una historia de amor con final inesperado”, cuenta Bassas. En ese contexto, al trío protagonista le toca viajar a Edo, la ciudad del shogun, donde recibirán el encargo de investigar una serie de desapariciones de campesinos en la zona de Hakone, al sur. “Algo extraño está sucediendo en las montañas”, agrega el escritor, contento de ver en las librerías esta segunda entrega que ha tardado un poco en llegar porque “me he dedicado a mi otra faceta literaria, la novela negra”, donde acaba de publicar Siempre pagan los mismos. “Pero regresar a Japón siempre es un bálsamo; me permite otras cosas”, como crear “una mezcla entre historia de aventuras y con toques de fantasía, por un lado, y de novela histórica, por otro”.

Así, en este texto, “el lector se encontrará con dos mundos: uno real y cotidiano, histórico, el de los samurais del período Edo, y con otro fantástico, en el que habitan los espíritus y los demonios propios del folklore japonés”. Aunque, como dice el maestro, “detrás de un demonio siempre suele esconderse un hombre de carne y hueso, mucho más peligroso que un espíritu”, apunta Bassas, que, además de los personajes que ya presentó en el primer volumen, ha creado otros como un aprendiz de monje, un jesuita, un samurai perteneciente a un clan desaparecido dispuesto a vengar a su señor y un nanban o, lo que es lo mismo, un occidental, que en este caso es un alquimista portugués envuelto en un complot para acabar con el régimen político imperante. Como es habitual, también tendrán su papel figuras que existieron en la realidad, como Yagyu Munenori, “uno de los mejores espadachines de su época, que escribió tres libros esenciales sobre el arte de la esgrima y el combate” y que en esta historia ejerce de jefe de los servicios de espionaje secretos del gobierno. Y es que, como en el caso anterior, los duelos y los enfrentamientos a espada harán las delicias de los aficionados.

de 12 a 99 años También gustará a muchos lectores encontrarse con un contexto histórico detallado, que en este caso se refiere al momento en que, después de la victoria de Tokugawa Ieyasu en la batalla de Sekigahara, “Japón cerró una larga etapa de guerras entre clanes y se dispuso a adentrarse en un tiempo de paz”. Entonces se establecidó el Bakuhan, “una nueva forma de gobernar en la que el shogun regía con mano dura los destinos del país, pero permitía que los distintos señores feudales gobernaran sus territorios con cierta libertad e independencia”. Pero, claro, esas leyes “cambiaron en gran medida el estatus de los samurais, cuya ocupación principal, la guerra, quedó en un segundo plano”.

En cuanto al público al que le puede interesar esta novela, el autor opina que El misterio de la gruta amarilla “va dirigida a cualquier persona entre los 12 y los 99 años, o más, si las energías siguen vivas”. En definitiva, a todos aquellos “interesados en el Japón de los samurais y el folklore japonés” y a los que, “sin ser fans de lo nipón, sí les gustan las historias de aventuras y de misterio”. Y sobre si habrá más entregas de Aki Monogatari, dice que eso ya no depende de él, “sino de los lectores”. Eso sí, ya ha empezado a planificar la siguiente peripecia, “que guardará un relación muy particular con España, porque en ella viviremos la construcción del galeón que llevó a un nutrido grupo de samurais a recorrer México, España e Italia, en la conocida como Embajada Keicho, que propició el año dual España-Japón en 2013-2014”.