ez dok Amairu, oroituz (Ez dok Amairu, en el recuerdo) es el título de la “mirada retrospectiva” que arrojarán, entre las 19.00 y las 21.00 horas, cuatro investigadores de la mano de la Cátedra Mikel Laboa de la UPV/EHU, cuyo director, Juan Cruz Igerabide, recuerda que el grupo surgió “en un contexto encorsetado”, en plena dictadura, para llegar a “constituir un fenómeno cultural de amplia y duradera repercusión”.
“Aún hoy sigue imprimiendo su sello a diversas manifestaciones culturales: los nuevos músicos actuales hacen referencia a cantautores de Ez Dok Amairu; Laboa y Lete dieron conciertos prácticamente hasta sus últimos días; Benito Lertxundi continúa llenando salas de conciertos; sus discos se siguen vendiendo y escuchando con frecuencia y aún están presentes en los medios de comunicación”, afirma Igerabide, para quien es preciso tener en cuenta que este grupo surgió en un momento, los años 60 del pasado siglo, con el siguiente contexto: “la herida de la guerra civil aún supurando profusamente, una sociedad dominada por el miedo y por una tradición sociorreligiosa retrógrada mezclada con un desarrollismo capitalista que provoca migraciones en masa, a la vez que se cuelan por resquicios los nuevos aires que llegan de Europa tales como marxismo moderno, Concilio Vaticano Segundo, existencialismo o Mayo del 68, y de América, como movimientos de liberación latinoamericanos, contra la Guerra de Vietnam, o el fenómeno hippie”. En esa conyuntura, “surgen en Euskal Herria movimientos de renovación cultural en diversos ámbitos -artes plásticas, música, teatro-, entre ellos Ez dok amairu”, añade Igerabide, que introducirá las cuatro conferencias que componen el acto de hoy.
txalaparta en los encuentro de pamplona de 1972 La primera correrá a cargo de la navarra Ana Gandara (Sunbilla, 1986), que hablará de su tesis, presentada recientemente, en la que realiza una aproximación a este fenómeno desde el punto de vista de las ideas culturales de la época. Como ya indicó hace unas semanas en una charla similar a la que ofrecerá hoy, la “realidad etnográfica” tuvo una gran importancia en la configuración de Ez Dok Amairu, que echó mano de la txalaparta y del bertsolari, que, según Oteiza, que también integró este movimiento, era la figura fundamental de la estructura mental de la comunidad vasca. Otro elemento indispensable fue la creación de “reglas” que ayudaron a la sociedad vasca a percibir “la importancia de las emociones colectivas”. Así, aunque los recitales de Ez Dok Amairu tenían un innegable componente vanguardista, sus promotores introducían elementos familiares para favorecer la comunicación con el público. Mediante la repetición de estrofas o invitando a los espectadores a cantar, estos “entraban en una especie de trance que ayudaba a crear lazos afectivos hacia lo que se transmitía sobre el escenario”.
La txalaparta en los Encuentros de música contemporánea de Pamplona es el título de la ponencia del investigador y músico Enrike Hurtado. Durante su intervención, dará a conocer cómo en 1972 gran cantidad de músicos y artistas contemporáneos se reunieron en Pamplona, uno de los primeros encuentros de arte público de estas características celebrados en Europa. En esta cita, los Hermanos Artze ofrecieron una sesión de txalaparta que encandiló a John Cage y a Steve Reich, entre otros, músicos de vanguardia interesados en un instrumento que justo acababa de salir del ámbito rural.
En tercer lugar, Imanol Artola presentará Benito Lertxundi y Ez dok Amairu, “un análisis desde la perspectiva de la construcción nacional”. En su opinión, hay dos Benitos: el primero es un cantautor “político” que entre 1965 y los años 90 escribe contra el franquismo y canta a la nación vasca, y el segundo, a partir del disco Hitaz oroit (1996), es “más íntimo y filosófico”. Le seguirá Oier Araolaza, que explicará la relación del grupo con la danza, y lo hará con la colaboración de Marian Arregi, impulsora del emblemático grupo Argia junto a Juan Antonio Urbeltz, y de sus hijos, Mikel Urbeltz (violín) y Maider Urbeltz (arpa), que interpretarán algunas danzas. Ez dok Amairu y Argia compartieron sus trayectorias durante los primeros años y trabajaron juntos asiduamente. De hecho, Marian Arregi colaboró con el trío Kemen, con Xabier Lete y con Benito Lertxundi.
La jornada de hoy finalizará con el proyecto Itzal Zaunka, en el que, haciéndose eco del catácter multidisciplinar de los espectáculos del grupo, Harkaitz Cano, Antton Olariaga, Jexusmai Lopetegi y Mitxel Muruaren, aúnan música, imagen y palabra.
Festivales. Ez dok Amairu funcionó entre 1966 y 1972. La canción fue el medio para lanzar mensajes nuevos de justicia, paz y libertad y para expresar la necesidad de crear una conciencia de pueblo y de transmitir esperanza. Y como era el medio para difundir el mensaje, los festivales se convirtieron en pretexto para que la gente se reuniera.
Miembros. Benito Lertxundi, Jexux Artze, Jorge Oteiza, Jose Angel Irigaray, Jose Anton Artze
Julen Lekuona, Lourdes Iriondo
Mikel Laboa, Néstor Basterretxea
y Xabier Lete, entre otros.