Hace veintiún años, los hermanos Almagro, Luis y Cristóbal, decidieron abrir el Bar Ona en el barrio pamplonés de la Chantrea. Durante estas dos décadas, el establecimiento se ha convertido en todo un referente de la zona, gracias al trato personal y a la buena gastronomía que se elabora entre sus fogones.

El Bar Ona es más que un establecimiento familiar, ya que los clientes que frecuentan el local “forman parte de la gran familia”, explica Luis Almagro. Desde las cinco de la mañana que abren la persiana, “es un goteo continuo de personas que entran para consumir desayunos, almuerzos, comidas y que continúa hasta la noche para tomar cenas”, indica Almagro.

Principalmente, el Bar Ona se caracteriza por preparar todo tipo de cazuelicas caseras típicas de la gastronomía navarra como callos, ajoarriero, lechezuelas, albóndigas en su salsa, entre otros, siempre elaborados con productos frescos y locales. El propietario indica, a su vez, que “los mejillones al vapor es el plato más demandado, quizás por conseguir cocerlos en su punto y por darle nuestro toque especial”.

Asimismo, el Bar Ona ofrece una gran variedad de bocadillos y la posibilidad de confeccionar un plato de “huevos con todo” al gusto del cliente. Por su parte, Luis Almagro también comenta que admiten todo tipo de encargos para degustar en el local como paellas o calderos y que en fechas concretas ofrecen platos especiales como es el caso de San Fermín, en el que sus clientes podrán degustar cazuelicas de estofado de toro, así como almuerzos completos de platos combinados.

Amplia variedad de referencias vinícolas El Bar Ona, situado en la calle San Cristóbal del barrio pamplonés de la Chantrea no solo se caracteriza por su amplia variedad de elaboraciones caseras sino por su extensa carta de vinos. En este aspecto, Almagro destaca los vinos de las Bodegas Solar Viejo “por su singularidad y personalidad única”, que son muy apreciados por sus clientes que acuden al bar para tomar un “pote” a media mañana o por la tarde. Asimismo, la oferta vinícola se completa con referencias de la Denominación de Origen Navarra, “de diferentes puntos de la geografía foral” y otras denominaciones nacionales.

El carácter familiar que define al Bar Ona le otorga cercanía y calidez, creando un buen ambiente en el local y posicionándose, de esta manera, en un referente gastronómico de la Chantrea. El propietario recuerda que son “un bar de barrio y, por tanto, los precios son económicos y asequibles para todos los bolsillos, acercándonos un poco más a las exigencias de nuestros clientes”.