ha llegado la hora de medir el efecto del desaliento en el ánimo del artista, tal y como una empresa láctea mide el efecto de la leche corriente y de la leche de primera calidad en el cuerpo de las ratas. ¿Y con qué alimentamos a nuestras mujeres artistas?” Son palabras escritas por Virginia Woolf en Una habitación propia, un ensayo que ha adaptado a la escena María Ruiz y lo encarna la actriz Clara Sanchís. El resultado de esta propuesta podrá verse hoy, a partir de las 20.30 horas, en el Auditorio Barañáin. Las entradas ya están a la venta en la web www.auditoriobaranain.com y en la taquilla del auditorio, abierta dos horas antes de cada espectáculo.

Tras la aprobación de la ley del sufragio femenino en el Reino Unido, Woolf indagó en el papel que la mujer había desempeñado en la historia del arte, tradicionalmente dominada por hombres y analizó los pormenores del incipiente movimiento feminista del que formó parte a principios del siglo XX. En su discurso, una defensa apasionada de los derechos de la mujer y una particular contribución literaria a la emancipación femenina no exenta de opiniones polémicas. Asimismo, critica los prejuicios a los que debe hacer frente como novelista y subraya cómo la discriminación y la pobreza han afectado a las artistas a lo largo de los siglos.

Una habitación propia se centra, en definitiva, en la mayor revolución social de todos los tiempos: la equiparación de mujeres y hombres ante la ley. De su protagonista, Clara Sanchís, la crítica ha destacado que ejecuta “una soberbia actuación interpretando a Virginia Wolf. Ella solita levanta el texto a fuerza de ironía galopante y acompañada de una alfombra, unos libros polvorientos y un piano donde a ratos se vuelca y golpea?”

María Ruiz pone sobre las tablas a una escritora que, en 1928, ofrece una conferencia ante unas jóvenes estudiantes sobre el tema Las mujeres y la literatura. Sus palabras, irónicas y afiladas, son el relato vivo de un descubrimiento: para dedicarse a la literatura, una mujer necesita dinero y una habitación propia. Solo hace nueve años que se le ha concedido el voto a la mujer. ¿Por qué los hombres beben vino y las mujeres agua? ¿Por qué un sexo es tan próspero y el otro tan pobre? ¿Cuál es el efecto de la pobreza en la literatura? Estas son solo algunas de las preguntas que Clara Sanchís lanza al aire.