San Jorge gana la batalla a la pintura acrílica

El proceso de restauración final de la figura, que data del s. XVI, ha sido una labor ardua que se ha dividido en tres fases. La primera de ellas consistió en el traslado de la imagen, desde la parroquia de San Miguel, a las instalaciones del servicio de patrimonio histórico. Es aquí, según relataba ayer Alicia Sancho, donde se hicieron estudios previos, que incluían el de la policromía, y también tomas de muestras para detectar qué zonas estaban más dañadas. Para una detección de los desperfectos más efectiva, contaron con la ayuda de un estudio radiológico el cual permitió ver con claridad cuáles eran las capas originales que consiguieron sobrevivir a la escayola y la pintura. Entre ellas, la cara fue la menos perjudicada mientras que el pecho perdió una parte considerable de esa policromía característica del San Jorge.

En la segunda fase de la restauración, se procedió al levantamiento de los repintes. La eliminación de las capas aplicadas anteriormente no fue del todo satisfactoria. Aún siguen quedando restos de pintura acrílica que no se han podido quitar debido a estar demasiado incrustadas. Según explicaba ayer Alicia Sancho, las pinturas utilizadas en manualidades, como es el caso, presentan una calidad baja y por ello, para obtener colores como el rojo, se utilizaron anilinas (compuestos orgánicos líquidos), las cuales son bastante difíciles de quitar una vez aplicadas.

Por último, en la tercera fase del proceso se llevó a cabo la recuperación de la capilla. Un primer paso fue volver a obtener la capa de yeso en aquellas zonas donde no había policromía para, posteriormente, pintar respetando siempre la figura original.

La figura

Maestro Tarín

La figura de San Jorge a caballo, de estilo gótico hispanoflamenco, fue tallada alrededor del año 1500 en madera de nogal por el maestro Tarín, o también conocido como Terín. Natural de Zaragoza pero residente en Estella, dio forma a una escultura de gran tamaño (200x150 centímetros), la cual pesaba unos 250 kg. El maestro Tarín quiso representar al santo a caballo abatiendo al dragón, con San Jorge vestido de guerrero y con el yelmo levantado.

A parte del San Jorge, Tarín también llevó a cabo varias obras como el San Miguel, el Cristo y Santa Águeda en San Miguel de Estella; el Cristo y San Juan Evangelista en Lerín y, por último, el San Bricio de San Martín de Ecala y los Santos Juanes en Muruzábal.

Costes

Recuperación

Durante la presentación, también se dieron a conocer los gastos que había supuesto el viejo y reformado San Jorge. Según explicaba Alicia Sancho, los costes de la recuperación, que corrieron a cargo del arzobispado, supusieron 1.513,71 euros en cuanto al traslado. El estudio radiológico para detectar qué partes eran salvables costaron “casi 6.000 euros pero era fundamental para saber que íbamos a tener debajo y cómo estaba la estructura de la pieza”. Asimismo, “la retirada del repinte y los materiales añadidos que los hizo una empresa costaron 10.430 euros; la reintegración y el acabado la ha hecho otra empresa de navarra por un total de 11.826 euros. La inversión económica hasta la fecha ha sido de 30.759,32 euros”.

Alicia Sancho también quiso destacar la labor fundamental de todos aquellos que han participado en el proceso de restauración: “ Han participado 5 especialistas en conservación y restauración de bienes culturales; 3 técnicos radiólogos y técnicos del servicio de Patrimonio Histórico del Gobierno de Navarra. En total, las empresas han empleado 780 horas y 200 horas han sido las invertidas por los técnicos del Gobierno de Navarra”.

Inconvenientes

Desconocimiento

Durante la ronda de preguntas, también hubo tiempo para responder a aquellas cuestiones sobre los inconvenientes de no tener la formación indicada para llevar a cabo este tipo de restauraciones: “Yo creo que ella tenía conocimientos ya que, de hecho, tenía una tienda de manualidades y algunos vídeos colgados dando cursillos, clases, información sobre cómo restaurar piezas. Creo que pensaba que sabía hacerlo pero por mucho que hayas hecho bellas artes o un cursillo de manualidades, tienes que tener conocimientos como, por ejemplo, de química o saber cómo se comportan los materiales originales, cómo se comportan los que vas a poner tú, qué técnicas y metodologías te va a permitir recuperar una pieza para poder enfrentarte a una obra de arte”.

El director del Servicio de Patrimonio Histórico, Carlos Martínez Álava, también quiso dar su versión de los hechos diciendo que “no hay duda de que hubo una buena voluntad” pero “lo primero es conocer bien la pieza, conocer bien el inmueble y a partir de un buen conocimiento de la obra artística, ésto te permite diseñar soluciones de conservación adecuadas porque si no conocemos bien la pieza las soluciones de conservación éstas resultarán inadecuadas. La clave es conocer bien lo que tenemos y a qué nos enfrentamos y eso solo lo puede hacer el personal cualificado”.

27 de Mayo de 2018. El director del Servicio de Patrimonio Histórico, Carlos Martínez Álava, y la jefa de la sección de Registro de Bienes y Arqueología reciben el aviso de que la figura de San Jorge está siendo modificada.

7 de Junio de 2018. Alicia Sancho y Carlos Martínez viajan a la Iglesia de San Miguel (Estella-Lizarra) para proceder a la inspección de la talla.

27 de Junio de 2018. Se lleva a cabo el traslado de San Jorge al Fondo Arqueológico del Gobierno de Navarra.

3 de Julio de 2018. Estudio Radiológico de la figura para analizar en profundidad la figura.

5 de Julio de 2018. Continúa el estudio radiológico de la obra.

Agosto de 2018. Estudios previos que incluyen el de la policromía y tomas de muestras para detectar qué zonas estaban más dañadas.

Septiembre de 2018. Continúan los estudios previos.

Octubre de 2018. Retirada del repinte y materiales añadidos.

Diciembre de 2018. Retirada del repinte y materiales añadidos.

Enero de 2018. Reintegración y acabado.

Febrero de 2018. Reintegración y acabado.

Marzo de 2018. Se llevan a cabo diferentes pruebas sobre el tipo de acabado de la obra, la cual data del s.XVI y su posterior reintegración.

Marzo de 2018. Continúa el proceso de reintegración en el que colaboran 200 técnicos del Gobierno de Navarra.

Mayo de 2018. A finales del mes de Mayo se pone fin a la restauración.