Pararse a contemplar un cuadro que nos llama la atención es una experiencia maravillosa. Todos los elementos que lo componen construyen un discurso que dialoga con el espectador. Se produce una conversación íntima, personal, única. ¿Pero qué ocurre si intentamos expresar en voz alta los discursos que se generan en ese diálogo interno? La respuesta se encuentra en el Museo de Navarra. Este, junto con París 365, llevó a cabo durante la primavera pasada el proyecto Cuadros Animados, en el que niñas y niños de 6 a 12 años dieron vida a una pintura flamenca dotándola de sonido y movimiento. El resultado se puede ver ahora en la web de este centro artístico.

A lo largo de tres meses, Hijab Domínguez Chentouf, Favour Ojezua, Bessing Ojezua, Jesús Steven Fuentes Iparraguirre, Emily Carapaica Chacín, Isaelis Carapaica Chacín, Itziar Zabalza, Leysi Brisset Florencio Espinosa y Dina El Allaoui Soulimani, de Garabato -recurso de infancia de París 365-, han estado trabajando para dar vida a los sonidos del arte, concretamente del cuadro Trabajo de la tierra, de Jacob Bouttats. “La capacidad educativa que tiene el arte no es algo desconocido, y queríamos que este proyecto fuera un diálogo constante entre los niños y niñas y el arte”, destaca Loredana Agosta, coordinadora de Garabato, quien ha trabajado junto a Eva Rada, directora y realizadora del mismo. Así, Cuadros animados se ha convertido en una iniciativa que, además de ayudar en la inclusión de estos pequeños, también ha permitido “impulsar su creatividad”.

“Si damos voz a un cuadro le damos vida y una historia que se mezcla, al mismo tiempo, con la historia de estos pequeños”, sostiene Agosta. Y esto se puede apreciar perfectamente en la página web del Museo de Navarra o de Cultura, desde donde se puede acceder a este proyecto. Ahí, el cuadro de Bouttats se llena de iconos sobre los que pulsar. Entonces, empieza la magia. Según el icono, empezaremos a descubrir algo de movimiento en el cuadro, a la par se escuchan unos sonidos concretos. En otros, surge la voz en off de los niños y niñas participantes, que explican las diferentes escenas de la pintura. “Hemos podido contar con medios y conocimientos que nos han permitido dar vida a una obra de arte, lo cual convierte a este proyecto en otra obra de arte en sí misma”, explica Agosta.

Por su parte, Rada afirma que el proyecto suponía “un reto muy bonito” y admite que se sorprendió con la elección de las y los pequeños. “No era el cuadro más sencillo, pero parece que les llamó la atención”, dice, y añade: “Desde muy pronto, percibieron que había dos líneas muy diferentes en la pintura: una más fantasiosa y otra más cercana a la realidad; y que vean eso en una pintura es algo maravilloso pero para lo que es necesario pararse un tiempo y observar”.

Hijab Domínguez Chentouf, de 9 años, fue uno de los menores de Garabato que participaron en Cuadros animados. Según comenta, eligieron el cuadro Trabajo de la tierra “por la representación que tenía”. “Nos produjo algo especial en el cuerpo que nos gustó; no se puede describir con palabras”, dice. Al mismo tiempo, señala: “Ha sido un buen taller, nos lo pasamos muy bien poniendo sonidos al cuadro y hemos podido ver cosas muy bonitas”. También Leysi Brisset Florencio Espinosa, de 10 años, sostiene que han “aprendido un montón” con esta iniciativa, que les ha permitido divertirse haciendo “algo diferente”. “Lo que más me ha gustado ha sido grabar las voces y contar las historias que veíamos en el cuadro”, apunta, para añadir que la escena que más le atrajo fue “la de la madre que mece al niño”.

campaña ‘somos vecinos/as’ El Museo de Navarra, a través de la campaña Somos vecinos/as, sigue trabajando para desarrollar la colaboración, la participación y el diálogo de la sociedad por medio del arte. Dentro de las acciones colaborativas y calendarizadas, el museo viene realizando por segundo año consecutivo y de la mano de París 365 y Garabato talleres infantiles dentro de los campamentos urbanos. Este año, los niños y niñas tendrán la oportunidad de convertirse en arqueólogos o incluso en cazadores prehistóricos.

Otra de las acciones llevadas a cabo dentro de esta campaña es La obra elegida. Tras la visita al museo, siete asociaciones (Asociación Convivir en lo Viejo, IPES Elkartea, Emprendimiento social París 365 y Garabato, Colegio Sto. Tomás, San Francisco, La Majarí y Plazara) han seleccionado una obra que da voz a sus valores o por la que se sienten representadas. Los vídeos de las obras elegidas se pueden ver en la página www.culturanavarra.es y son accesibles para cualquier visitante del Museo de Navarra en la propia sala.