- ¿Cómo está afectando este parón al arte urbano?

-La mayoría de festivales o encuentros de arte urbano, en el norte y en general, suelen celebrarse entre la primavera y el otoño. En estas fechas que estamos es cuando se cierran y organizan la mayoría de ellos, así todo se ha paralizado o suspendido. Recuerdo, en los primeros días del aislamiento, ver mis redes sociales plagadas de carteles de cierre o eventos suspendidos por parte de amigos y conocidos. Exposiciones, charlas, talleres, eventos€ fue muy triste. Personalmente todo esto también me ha afectado a nivel profesional. Este mes por ejemplo tenía que participar como invitado en un festival de arte urbano en Madrid, tenía un par de eventos programados para el verano, algunos encargos€ esperemos que parte de estos proyectos puedan salir adelante en un futuro. A nivel local es una pena porque cada vez se estaba viendo mas interés e iniciativa por parte de algunas entidades, así en 2019 pude pintar en el exterior de Geltoki, el exterior de las oficinas del Instituto Navarro de Juventud en Yaguas y Miranda o realizar un gran mural en el exterior del polideportivo José María Iribarren para el barrio de Ermitagaña.

Como trabajador autónomo, ¿cómo lo está sobrellevando?

-Básicamente mi actividad laboral se ha reducido a menos de la mitad. Me dedico a pintar murales por encargo que es por lo que más me conoce la gente, pero básicamente soy ilustrador. Trabajo con encargos personales, branding, arte conceptual€ Tengo la suerte de seguir con algunos encargos en los que puedo trabajar desde mi casa y estoy acostumbrado a largos periodos de aislamiento artístico, incluso los disfruto, así que lo llevo bien. Ahora trabajo en el diseño e ilustración para un CD que está preparando mi gran amigo Iñaki Rodríguez de la asociación Iruña Jazz.

Y a la vez creando ilustraciones relacionadas con esta crisis del coronavirus que se pueden ver en redes sociales. ¿Cómo surgen?

-Las hago en mis ratos libres. Ilustro de manera sencilla pensamientos, ideas o conceptos que toda esta situación me está generando y que comparto por mis redes sociales. Creo que una de las cosas que esta pandemia está destapando es lo importante que es el arte para la sociedad y el peligro que conlleva privatizarlo, convertirlo en objeto exclusivo de lujo, excluirlo de los programas educativos o escolares y en general no saber valorarlo lo suficiente a nivel social e institucional. Está siendo el flotador para no hundirnos en las aguas oscuras de este aislamiento social. La ilustración, la música, el cine, el humor, la literatura, el baile, los videojuegos€ se han convertido en válvulas de escape y en medicina mental. Los que nos dedicamos a estos campos creativos podemos dejar el ego aparcado por un tiempo y aportar nuestra chispa para mantener la llama encendida, sobre todo en nuestros círculos más cercanos, para restar y ahuyentar todas esas sombras que nos acechan. Mi perfil en las redes es normal o bajo, no soy un influencer, no uso bots, ni pago por publicidad o cosas de esas, ya les damos demasiado€ las uso como simple herramienta de comunicación y contacto. Eso sí, tengo la suerte de conocer en persona a la mayoría de mis seguidores, por lo que hago estas ilustraciones con mucho gusto y cariño, con la intención de sacarles una pequeña sonrisa. A mí me supone un desahogo y aunque es un poco triste decirlo, los likes sirven en esta ocasión de baliza para saber que todas esas personas están bien.

-Ahora que está prohibido salir a la calle, el graffiti ya no es que sea algo ilegal, sino lo siguiente... Imagine que dispone de un muro en Pamplona para pintar, para expresarse, para denunciar, animar... ¿Qué mensaje transmitiría a la gente?

-Si algo he aprendido de todos estos años de pintar graffiti es que puede convertirse en un arte al alcance de cualquiera, es público y de libre acceso, pero sobre todo que es sinónimo de libertad. Ahora a ese pájaro se le han cortado las alas. Me encantaría volver a poder pintar en la calle, lo mismo que darme un gran paseo en bicicleta. Lo primero que pintaría sería algo sencillo, sin complicarme, para volver a disfrutarlo. Pero me gustaría en un futuro -quién sabe, igual alguna institución o ente público me lee- rendir un homenaje a todas esas personas anónimas que están dándolo todo por esta sociedad: trabajadores de la sanidad pública, servicios de limpieza, servicios sociales, transportistas, agricultores y ganaderos, dependientes de supermercados y tiendas de barrio, barrenderos, panaderas€ hay tanta heroína y superhéroe a los que aplaudir... En cualquier caso, sería genial tener un gran mural en la ciudad que en un futuro nos recordase esto como algo del pasado y que nos sirviese para permanecer despiertos a la realidad que nos toque.

¿Qué le gustaría que cambiase después de esta crisis?

-Hay tantas taras... Ver la oscuridad de algunos gobiernos, empresas, entidades, instituciones o individuos que están aprovechándose de esta situación descaradamente y sin tapujos para lucrarse, me revuelve las tripas. Las mentiras y manipulación en algunos medios de comunicación, la propaganda política, el sálvese quien pueda, los ejércitos por las calles, la policía de balcón, los peligros de la viralización a través de las redes sociales mediante memes, fake news, bulos. Los mejores escritores de ciencia ficción lo van a tener complicado para crear nuevas distopías que superen la realidad que se nos ha plantado en toda la cara. Espero que todo esto nos lleve a un cambio global, a una evolución, dejar de ser esclavos, básicamente. Aprender a valorar las cosas sencillas, menos Amazon y más comprar en las tiendas de barrio, a respetar a la gente mayor, comprender el valor del servicio público en la sociedad. En definitiva, a cuidar y amar, pero no sólo con etiquetas verdes sino con gestos personales, a esta pequeña bola de agua, tierra y oxígeno en la que todos vivimos y giramos alocadamente por el universo. Me gustaría mandar a través de esta entrevista un abrazo extra gigante a toda la gente que la lea, familia y amigos. No os preocupéis, Braulio volverá a las calles€ Nos queda por delante un largo muro gris, pero pronto podremos volver a pintarlo usando todos los colores en su máxima expresión. ¡Fuerza y amor!

"En este estado de alarma y encierro los 'likes' sirven de baliza para saber que todas esas personas están bien"

"Esta pandemia destapa lo importante que es el arte para la sociedad, es el flotador en estas aguas oscuras"

"Sería genial tener un gran mural en Pamplona que en un futuro nos recordase esto como algo del pasado"