La Fábrica y el Festival Punto de Vista han publicado el libro Cartas como películas, que reúne correspondencia entre más de cincuenta cineastas contemporáneos, creadores en activo o que lo han estado hasta hace muy poco.

Jim Jarmusch, Jean-Luc Godard, Barbara Hammer, Ute Aurand, Chick Strand, Apichatpong Weerasethakul, Barbara Hammer, Margaret Tait, Fernando Trueba o Jem Cohen forman parte de este compendio que, si bien supone una obra coral con voces muy diferentes, cuenta con temas comunes como el público, el éxito o las películas no realizadas.

Como señala Garbiñe Ortega, coordinadora de la obra y directora de Punto de Vista, se trata de “una investigación apasionada, en la que me reto a encontrar cartas relevantes entre cineastas para trazar conexiones y relaciones impensadas con el objetivo de dibujar nuevas genealogías y familias cinematográficas”.

Es un libro que permite distintas lecturas, donde se proponen relaciones entre cartas e imágenes, saltos temporales, subcapítulos temáticos no explícitos, pequeños tributos secuenciados —como el dedicado a Harun Farocki, o a una generación del cine de vanguardia americano (Barbara Hammer, Chick Strand, Stan Brakhage, Carolee Schneemann) —, y epístolas imaginarias escritas para este proyecto por cineastas del presente (como Mariano Llinás, Ana Vaz, Deborah Stratman) y dirigidas a cineastas de la historia del cine, vivos o muertos, que no hayan conocido.

Por su parte, en el prólogo, Max Golberg indica que esta selección “se basa en una interpretación más amplia de la correspondencia, derrumbando la cronología para que cada una de las cartas pueda desarrollarse en un intercambio común: llamémosle cine".

Cartas como películas cuenta con tipos de relaciones muy variadas: desde cartas intergeneracionales, a cartas entre colaboradores, amigos e incluso amantes.

Junto a cartas mecanografiadas, postales, reproducciones de cartas manuscritas y correos electrónicos, el libro cuenta con dibujos, story boards o fotogramas, entre otros documentos, que permiten profundizar en el universo cinematográfico y personal de todos estos creadores.

En definitiva, como afirma Golberg el tema fundamental de este libro es “la comprensión y la admiración que se da entre cineastas”.