Los visitantes que acuden al Museo Reina Sofía de Madrid ya pueden fotografiar el Guernica, una decisión del nuevo director del centro, Manuel Segade, que se aplica desde el 1 de septiembre, con la única condición de no utilizar elementos de estabilización ni flash. Con esta medida, Segade quiere mejorar la experiencia de ver el cuadro más famoso de Picasso, según han explicado fuentes del Museo.

La decisión se ha tomado para “normalizar” la visita ya que la prohibición provocaba que los vigilantes de la sala estuviesen más pendientes de si alguien hacía fotos que de otras cosas, con lo que se había llegado a “situaciones complejas”.

En realidad, la prohibición afectaba a la sala entera en la que se encuentra el cuadro y estaba en vigor para proteger una obra, que se colgó de las paredes del Reina Sofía en 1992 procedente del Casón del Buen Retiro donde se había exhibido desde que el cuadro llegó en 1981 a Madrid tras 42 años en el MoMA neoyorquino.

Era la única zona del museo que los visitantes no podían fotografiar, pero ahora se ha eliminado la prohibición porque los medios tecnológicos han cambiado y ya no ponen en peligro la obra, han precisado las fuentes. Eso sí, no se podrá utilizar ningún tipo de estabilizador, ni palo selfi, ni trípode, ni flash. Y se seguirá controlando el aforo como hasta ahora.

Hasta ahora solo algunos rostros conocidos que han acudido a la pinacoteca se han fotografiado con el Guernica. Ese fue el caso de Mick Jagger, en 2022, lo que generó protestas por parte de algunos usuarios. El museo explicó entonces que la prohibición obedecía a la necesidad de evitar aglomeraciones y otro tipo de conductas que reducían la “calidad” de la visita. También recordaban que en los últimos tiempos se había abierto la mano en este aspecto –hay múltiples imágenes de visitantes junto al cuadro– y que es “prácticamente una recomendación”.

La visita del actor Pierce Brosnan también levantó una gran polémica cuando el propio museo subió su foto frente al lienzo de Picasso. Por entonces, debido a las quejas, el Reina Sofía hizo público un comunicado en su perfil de Facebook en el que pedía disculpas por el malestar de los usuarios, explicando que la polémica fotografía era “una acción de comunicación” como “otras muchas similares realizadas a lo largo de la historia” del museo.

Reivindicación

Picasso fallecía el 8 de abril de 1973 en la localidad francesa de Mougins, ocho años antes de que un avión de Iberia, el Lope de Vega, aterrizase en Madrid llevando la preciada carga. El 10 de septiembre, el avión procedente de Nueva York llegaba a Barajas y el 14 de octubre el Guernica se colgaba en las paredes del Casón del Buen Retiro. Allí permaneció once años, blindado y vigilado, hasta que el 26 de julio de 1992 fue trasladado al Reina Sofía por decisión del ministro de Cultura socialista Jordi Solé Tura. El cuadro de Picasso, convertido en un grito contra la barbarie, es la joya de la corona de la colección del Reina Sofía.

Desde entonces, este lienzo viajero, que recorrió ciudades de todo el mundo por decisión expresa del propio pintor, no se ha movido del Museo de Madrid. Las razones aducidas desde el Ministerio de Cultura y desde el propio Reina Sofía es que el cuadro no se encuentra en buen estado y que un traslado lo pondría en peligro.

El Gobierno vasco y el Ayuntamiento de Gernika han solicitado en numerosas ocasiones la cesión temporal del cuadro a Euskadi, como en la inauguración del Guggenheim o el 70 aniversario del bombardeo de la villa. Desde el Reina Sofía siempre se ha recibido una categórica negativa.

En breve

Sin flash. La prohibición de fotografiar el cuadro se levantó el 1 de septiembre, equiparándose la política relacionada con esta obra con las del resto del museo, donde se puede tomar fotos también sin luces ni palos para selfis .

Protestas. Algunos rostros conocidos que han acudido a la pinacoteca, como fue el caso de Mick Jagger o Pierce Brosnan se fotografiaron con el lienzo, lo que generó protestas por parte de algunos usuarios.