Marisa González, artista multimedia, feminista y pionera de la utilización de la tecnología en el arte, fue galardonada ayer con el Premio Velázquez de Artes Plásticas 2023, que otorga el Ministerio de Cultura, dotado con 100.000 euros.
El jurado destacó a Marisa González por “su amplia trayectoria como artista multimedia, pionera en la utilización de nuevas tecnologías desde los años 70 hasta la actualidad”.
Además, señaló que “feminismo, memoria y arqueología industrial, reciclaje y ecología, y atención a los procesos de exclusión y precariedad son otras notas que caracterizan su trayectoria”.
También resaltó su labor de búsqueda incansable de archivos, documentos y arqueologías industriales, siempre comprometida frente a las “desigualdades sociales y las amenazas ecológicas en nuestro mundo globalizado”.
Marisa González (Bilbao, 1943) estudió la Carrera Superior de Piano en el Conservatorio de Bilbao, es licenciada en Bellas Artes por la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Complutense de Madrid (1971), máster en el Art Institute de Chicago en el Departamento de Sistemas Generativos (1973) y BFA en la Corcoran School of Art, Washington DC (1976).
Toda su trayectoria artística está marcada por la relación con las tecnologías en continuo cambio de la sociedad contemporánea. Desde sus primeros trabajos con fotocopiadoras a principios de los 70, posteriormente con faxes y después con ordenadores y vídeo.
La simbiosis entre el arte y la tecnología, y teniendo como método el ensamblaje de diferentes técnicas, le ha llevado a generar un nuevo lenguaje codificado por ella misma.
Están presentes en todo su trabajo la reproducción de las imágenes y del fragmento y su repetición o generación de la forma como valores emblemáticos de lo contemporáneo.
Ha realizado más de 60 exposiciones individuales y 150 colectivas, como en la Bienal de Venecia, el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, Tabacalera (Madrid), o el Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona (CCCB).
En una entrevista tras recibir el premio, aseguró que no trabajará con la Inteligencia Artificial (IA) porque es un mundo que, a sus 80 años, ya no le “interesa demasiado”.
“No me voy a meter con ella, ya tengo 80 años, ya he investigado y es verdad que cada vez que sale una tecnología nueva todo el mundo da por hecho que estoy trabajando con ella. Y yo en broma respondo ‘oye, que yo era pionera cuando nada más había una y al año salía otra’”, explicó.
Su obra también presta atención a las distintas amenazas ecológicas. “Además de mi obra, reciclo, intento no consumir excesivas cantidades de agua ni luz y cada uno, con esas pequeñas aportaciones, intenta contribuir a que el cambio climático no avance”, afirmó.
Por último, la artista bilbaína reconoció que todavía no ha pensado a dónde destinará la dotación del premio -100.000 euros-. “No me lo quiero plantear, vamos a esperar y ahora quiero disfrutar. A lo mejor lo reparto con mis hijos”, concluyó González.