La historia de Cicely Saunders, pionera de los cuidados paliativos, llevada al teatro por David Clark, llegará el próximo 13 de marzo (19 h) a Civivox Iturrama, en Pamplona. Lo hará de la mano del grupo de teatro de ATLANTES Global Observatory of Palliative Care del Instituto Cultura y Sociedad (ICS) de la Universidad de Navarra. El estreno Cicely y David, cuya traducción por primera vez al español ha impulsado este grupo, tendrá lugar durante la XXVI Quincena de Teatro Universitario. El proyecto cuenta con el apoyo de la Fundación Pía Aguirreche y las entradas están agotadas.

Con este proyecto, ATLANTES, que celebra su décimo aniversario, busca expandir el proyecto iniciado por Clark, profesor emérito de Sociología de la Universidad de Glasgow y biógrafo de Saunders, para acercarlo al público hispanohablante. “Esta obra no solo busca rendir homenaje a nuestra pionera, sino también contar de manera amplia y accesible la historia de los cuidados paliativos modernos y su evolución”, explica la investigadora predoctoral Alicia Hernando-Garreta, que ha liderado el proyecto.

Para el equipo, al reto de la traducción se sumó enfrentarse a su primer proyecto teatral. Para prepararse, participaron durante seis meses en el Plan de Formación Teatral del Museo Universidad de Navarra, donde adquirieron destrezas en dirección, producción e interpretación y también recibieron apoyo logístico. “La decisión de involucrar a profesionales de cuidados paliativos en la representación en lugar de recurrir a actores profesionales añadió complejidad, ya que la representación implicaba asegurar que la interpretación transmitiera adecuadamente los valores y el espíritu de los cuidados paliativos”, valora.

Una ventana hacia la escucha, la empatía y la compasión

El resultado es una obra que “ofrece una ventana hacia los valores fundamentales de los cuidados paliativos, destacando la importancia de la escucha atenta, la empatía y la compasión en la atención a los pacientes en situación de enfermedad grave. Y el teatro se presenta como un vehículo ideal para transmitirlos: “A través de la autenticidad de la representación teatral, el público puede adentrarse en la experiencia de quienes enfrentan el final de la vida y aquellos que los acompañan en este viaje”, afirma la investigadora.

La obra, narrada en escenas que viajan entre 2005 y 1947, cuenta la relación entre Saunders y David Tasma, un inmigrante polaco enfermo de cáncer en el St. Christopher’s Hospice de Londres. A través de esta historia, explica, se brinda una “profunda reflexión sobre la naturaleza del sufrimiento humano y la importancia del apoyo emocional y espiritual en los momentos difíciles”. En este sentido, destaca que la universalidad de los temas abordados, como la enfermedad, la muerte y la esperanza frente al sufrimiento humano, “trasciende edad y profesión y alcanza a cualquier persona interesada en las complejidades de la condición humana y el cuidado”.