“Yo te levanté y eso no lo sabe nadie”, canta Malú en su nueva canción ‘Ausente’. Un dardo directo a Albert Rivera. No ha dejado puntada sin hilo la intérprete madrileña contra el que fuese líder de Ciudadanos y su expareja. Analizando la canción, que salió a la luz el pasado 31 de agosto, se puede descifrar todo aquello que la cantante ha guardado este tiempo. Malú y Rivera oficializaron el fin su relación el pasado mes de junio. Aunque el entorno familiar conocía este suceso desde meses atrás. 

La artista ha guardado silencio durante estos meses, manteniendo la discreción que la caracteriza. Pero parece que Malú ha llegado a un punto en el que ha querido decir basta y dejar claro que no todo era un cuento de hadas perfecto. A la hora de componer este tema ha contado con la ayuda de su amigo Pablo Alborán, quien ha dado vida y ritmo con su música a las palabras de la cantante. Según el cantante malagueño, “era la canción que ella necesitaba en ese momento”. Añadía que “he escrito esta canción desde el corazón y el alma porque la quiero y porque la respeto y la admiro desde hace muchísimos años. Una declaración de intenciones y una canción al desamor, esa ha sido la indirecta más directa a Rivera. Un amor que parece haberse quedado en blanco y negro.

Escuchando la canción se aprecia a una mujer incomprendida, que se siente sola y que no recibe apenas cariño. Lejos de quedar como una víctima dolida, Malú saca garra y no duda en atacar directamente. “Eres un extraño que pasea por mi casa”, canta. Su casa, no la de ambos. Deja claro que es una persona que con su actitud, el expolítico, se muestra como un ser ajeno que pasa por su vida. Esa persona que dice que la ama “cuando ve el precipicio”. Ella relata que malquerer se ha vuelto un vicio.

En el estribillo en el que la intérprete se deja la voz cantando “yo te levanté y eso no lo sabe nadie”, hace referencia a las múltiples ocasiones en las que ha apoyado a Rivera. Comenzando por su declive político, su salida de la vida pública, la inminente desaparición del partido Ciudadanos y los rumores que rondan alrededor del catalán sobre su simpatía con ciertas sustancias. Añadir que en el reciente funeral del padre de Rivera, Malú acudió a darle su apoyo. “Fui yo quien aguante el eco de mi nombre en todas partes”, señala la artista. Es cierto que los titulares comenzaban siempre con su nombre y, aún dejando de ser pareja, sigue siendo protagonista.

Ambos siempre han dejado claro que no había terceras personas en la relación. Malú ha mostrado una realidad muy triste para muchas personas en pareja, la soledad. Tener una persona al lado que no te hace compañía y que solo cuenta contigo cuando ve el precipicio. Eso le ha sucedido a la madrileña durante estos años en común. Pero deja claro que pase lo que pase, su hija va primero. Una prioridad que va por encima de cualquier ruptura. Añadiendo que ha sido una pareja ausente por mucho de intentar lo contrario.

 

Pero parece que el expresidente de Ciudadanos ha recuperado fácilmente la ilusión. Primero con la actriz Aysha Daraaui, y más tarde con su actual pareja, Carla Cotterli. Con ambas ha protagonizado imágenes en alta mar. Sobre todo la lluvia de memes de sus imágenes con Aysha Daraaui, que parece estar mordiendo la oreja de Rivera, mientras el susodicho pone cara de circunstancia, o dejándose querer. A lo que el exnaranjito respondió en una historia de su Instagram una imagen desde el yate y de fondo ‘A quién le importa’, de Alaska. Pues sí Albert, a quién le importa como un hombre de 43 años hace el ridículo en alta mar. Más relevante nos parece como tu expareja y madre de tu hija deja a la vista tu falta de empatía, comprensión y ausencia. En el último concierto de Malú, al cantar por primera vez ‘Ausente’, sus fans corearon “Rivera cabrón”. En ella vemos a una mujer cansada de aguantar sus lágrimas, de sentirse sola, desdichada y con un extraño en casa. Una mujer madura que planta cara al desamor y no deja títere con cabeza. Mostrando la pedrada, y no lo decimos solo por el adoquín que llevó hace unos años a un debate electoral, que tiene Albert Rivera.

 Parece que el príncipe naranja se ha desteñido un poco desde que su ex lanzase un mensaje tan rotundo en las estrofas de su canción.