PAMPLONA. El equipo de Ambros Martín, que había ganado sus tres partidos a domicilio en la anterior fase de grupos de la Liga de Campeones, apenas tuvo opciones ante el dos veces campeón de Europa en Eslovenia, que se mostró como un conjunto muy potente en ataque.
El conjunto estellés empezó bien el partido, con un 0-2, pero enseguida mostró su superioridad las locales, con un juego velocísimo que no pudo frenar el Itxako con deficiencias en el repliegue defensivo (9-6, m.14).
Lekic pudo con la defensa navarra y con 6 goles en la primera parte rompió a un Itxako que además cada vez lo vio más complicado en ataque, para llegar a perder por 7 goles (16-9, m.23) y no poder cambiar la dinámica del choque a pesar de dos exclusiones seguidas del Krim en los últimos minutos del primer periodo.
El técnico canario del Itxako varió el sistema defensivo en la segunda parte y con una defensa abierta dificultó el ataque local, pero las paradas de Navarro y los goles de Martín y Barbosa no fueron suficientes para hacer peligrar la victoria de un Krim que tuvo en Grubisic a un muro en la portería.