pamplona. Lleva tan solo un año al frente del conjunto blanquiverde y al comienzo del segundo ya lo hace en Asobal. Sin duda, son muy buenas noticias para el de Eibar.
A falta de un último vistazo de la Comisión ya es entrenador de Asobal, ¿cómo se siente?
Muy ilusionado porque el verano ha sido difícil. Hemos tenido que oír muchos rumores y muchos cambios de discurso en los mensajes que nos llegaban no solo de los organismos oficiales sino también de los equipos implicados. Ha sido un sinvivir porque teníamos claro que queríamos salir en Asobal, Anaita se lo merecía.
¿Qué ha sido lo mas duro de todo?
Los momentos de planificación de la pretemporada y de la planificación del equipo porque no sabíamos qué hacer. Teníamos posibilidades de subir pero no sabíamos por dónde tirar porque todo se veía muy lejos. Así que cuando ya llegó la mitad de julio decidimos hacer un equipo muy competitivo para la B. Apostamos fuerte en algún puesto y es una plantilla que será justa para Asobal, pero podremos competir bien.
A lo largo del verano, ¿llegó a pensar que esto podría pasar?
Sabíamos que había posibilidades porque existían varios equipos con problemas económicos pero tampoco se conocía si esos problemas les iban a impedir salir en Asobal. Luego esos equipos fueron saliendo, a la vez que se decía que Asobal igual contaba solo con 15, además de que Toledo iba antes que nosotros... Al final todo ha sido una locura.
¿Le ha sorprendido la negativa de Toledo?
No, porque ellos decían que querían salir pero también afirmaban que necesitaban sanear sus cuentas. Creo que han hecho lo correcto porque si, al final, han visto que es mejor pasar un año en la B para que no les pille el toro como están pillándole al 80 o 90% de los equipos, es una decisión muy acertada.
¿Qué es lo que más le ilusiona de estar en Asobal?
Por un lado, siento que Anaitasuna ha peleado un montón estos años por el balonmano y ha conseguido un gran salto de calidad en el tema deportivo. El ascenso es un premio a la labor de todos los que han estado aquí antes que yo, un premio a la constancia de todos estos años. Para mí es muy gratificante poder estar en la élite. Aunque sé que vamos a tener que aprender mucho y ponernos al día en un montón de temas porque es un gran salto competitivo.
Este va a ser su segundo año en Anaitasuna y ya ha conseguido estar en Asobal...
Estoy muy contento, pero tan solo hemos recogido la guinda que ha dejado la gente que estaba antes trabajando en el Anaita. Y a nosotros nos ha tocado ponerla en el pastel.
La última vez que pasó esto fue con el Teka hace tres años y ahora ocurre con Anaita, ¿cómo se encuentra el equipo?
El equipo está ilusionado pero con mucha humildad. Van a tener que trabajar mucho y afrontar momentos difíciles. Aún se están terminando de creer lo que ha pasado.
Quizá ha habido también poco tiempo para prepararles psicológicamente, ¿no?
Claro porque, como entrenador, he ido poco a poco aumentando los ejercicios tanto en el ámbito físico como en el psicológico, y que, de repente, en una semana, te cambien de categoría es un choque muy fuerte. Ahora tenemos otro objetivo en mente y hay que concienciarse bien...
Entonces, ¿ve al conjunto con nivel suficiente para mantenerse en Asobal?
Por supuesto, si no, no habríamos aceptado el ascenso. Anaitasuna ha valorado todos los puntos antes de dar este paso, el económico pero también el deportivo. Estamos convencidos de que podemos dar este paso adelante.
¿Qué sensaciones está dejando Pierre-Yves Ragot?
Es un chico que ha hecho un esfuerzo personal muy grande por estar aquí para conocernos y, sobre todo, para que le conozcamos por lo que dice mucho de él. En la Segunda División Francesa ha sido el tercer máximo goleador. Además, tenía opción de renovar con su equipo para ascender y algunas ofertas de la Primera División francesa y ha hecho un esfuerzo por venir por lo que dice mucho de él. Tenemos otras dos opciones en el mercado porque es prioritario suplir la marcha de Juan Pablo. Tomaremos una decisión a finales de esta semana.
¿Va a llegar algún jugador más?
No, esta decisión no nos ha dado margen de maniobra. No vamos a tocar el dinero de la Sociedad y vamos a salir con lo que tenemos. Si en un futuro con los patrocinadores o con las ayudas institucionales se puede hacer algo, se hará, pero de momento no va a venir nada mas que para suplir la baja de Juan Pablo.
¿Cómo cree que va a reaccionar la afición ante la noticia del ascenso?
Con mucha ilusión porque tenemos un comienzo realmente bonito, jugamos en casa contra el Barcelona y sé que la gente responderá. A ver si podemos hacer que la gente vea buen balonmano.
Se van a volver a revivir los partidos del Amaya contra Anaita. El primero será el 19 de noviembre, ¿cómo lo ve?
Con mucha ilusión porque es un partido muy atractivo tanto para nosotros como para la afición del balonmano navarro. Aunque todavía es pronto para pensar en eso, hay que ir paso a paso.
Mañana se hace oficial todo, cuando ocurra, ¿habéis pensado cómo vais a celebrarlo?
No, todo ha sido muy rápido y no hemos tenido tiempo de pensar en eso. Aunque si te soy sincero, los jugadores sí que me han dicho: "¡Si subimos a Asobal tenemos que jugar un partido de futbito y luego hacer una buen cena!" (se ríe).