Pamplona - Basket Navarra afronta hoy casi una final para el ascenso -Arrosadia, 20.30 horas- y lo hará con la grada a rebosar para dar su apoyo al equipo de Xabi Jiménez. Los cinco navarros (cuatro de nacimiento y otro de adopción) serán fundamentales para incendiar a la grada de Arrosadia y que esta se convierta en el sexto jugador en la pista.
Era fácil distinguir la temporada pasada a Sergio Fuentes y a Julen Velasco sentados en la grada animando a Basket Navarra como los primeros. Por entonces no formaban parte de la estructura del club, pero apenas unos meses después, los dos jóvenes han dejado los ánimos y el chándal para ponerse la camiseta y saltar a la pista. Ambos han ido creciendo juntos en las categorías inferiores de Burlada y, tras pasar por el Valle de Egüés de EBA, esta temporada tienen ficha con el filial de BNC pero están en las convocatorias del primer equipo rojo.
Sergio Fuentes se ha ganado un puesto en la rotación como suplente de Carles Marzo y ha demostrado su crecimiento llegando a ser fundamental en varios encuentros, como el de Gijón. Por su parte, Julen Velasco entra de vez en cuando en la rotación interior y en el último encuentro en casa anotó su primera canasta con la primera plantilla.
Otro joven, aunque con más experiencia en el equipo, es Pablo Yarnoz. El joven alero se ganó un puesto en la rotación la temporada pasada y esta ya es miembro de la primera plantilla de pleno derecho. El navarro sigue creciendo y la semana pasada, en Vitoria, realizó su mejor encuentro con una actuación defensiva excepcional. Mientras jugaba en San Cernin o cuando también pasó por el Valle de Egüés era facil verle en la grada como un aficionado más. Su juego, intenso y agresivo en defensa, suele incendiar a la grada de Arrosadia por lo que se antoja fundamental para el encuentro de esta tarde con un pabellón que se espera que se llene como ya lo hizo la temporada pasada.
Los veteranos, de líderes Ellos tres se refugian en el calor de los veteranos. De ellos hay dos que son de la casa. Adrián García es nacido en Madrid, pero tanto en el club como en la afición se le considera uno más tras tantos años en el club. De hecho, ya está afincado en Navarra, de donde es su mujer. El ala pívot ha modificado su juego de alero para reconvertirse en un jugador polivalente que usa su tremenda inteligencia en la pista para ayudar mucho al equipo.
Por último, Iñaki Narros es el capitán, estandarte y casi leyenda del Basket Navarra. Él es uno de los veteranos del equipo y el que acoge a los jóvenes navarros que van entrando en el grupo. Es uno de los que más sufre cuando el equipo pierde y de los que más se alegra cuando se gana. Es un aficionado más y disfruta de los encuentros como el de hoy tanto o más que si estuviera en la grada.
Todos ellos, los cinco, son los estandartes en los que se fijan muchos de los que hoy llenarán la grada del pabellón de Arrosadia para un encuentro muy importante para el futuro de esta temporada del equipo de Xabi Jiménez.
