JAVIER. La emblemática explanada que da cobijo al Castillo de Javier volvió a retroceder 500 años para acoger una de las carreras populares más incipientes del panorama navarro: La Conquista del Castillo. Los participantes recorrieron los ocho kilómetros que separan la Calle Mayor de Sangüesa, ambientada con un mercadillo medieval, y uno de los lugares más emblemáticos de la Comunidad Foral, en el que se pudo ver a los competidores exhaustos por el esfuerzo, pero a la vez muy satisfechos por el éxito logrado.

A pesar del fuerte viento que acompañó a los corredores durante la totalidad de la prueba, el tiempo facilitó la labor de aquellos que decidieron emprender la valiente aventura de conquistar el Castillo de Javier.

Entre los participantes destacaban varios que ya habían corrido en anteriores ediciones, como es el caso de Camila Redín y Javier Redín, padre e hija que asaltaron el Castillo de Javier por tercer año consecutivo. "Ha vuelto a ser una experiencia realmente gratificante. Cuando bajas por la cuesta y ves el Castillo a mano izquierda es muy emocionante. Es el tercer año que venimos a correr, y sin duda alguna, si podemos, volveremos a correr". Al mismo tiempo, los Redín quisieron valorar positivamente la iniciativa de la organización de haber adelantado un mes el evento. "La verdad es que que se haya podido disputar antes es un lujo, básicamente porque el tiempo, a pesar del fuerte viento, nos ha ayudado mucho más que en ediciones anteriores. Con mucho calor, los años anteriores, los últimos kilómetros se hacían muy duros, en cambio hoy por ayer hemos podido disfrutar mucho más", aseguraron Javier y Camila.

Naiara Etxaburu, en cambio, debutaba en la prueba, y quedó impresionada por la majestuosidad de la llegada. "Es impresionante llegar y encontrarte con el Castillo. Es el primer año que corro y la verdad es que no conocía el recorrido, pero ha sido una experiencia muy bonita. Además, el tiempo nos ha acompañado. En Sangüesa hacía algo de frío y nos hemos tenido que abrigar bien, pero durante el resto de la prueba la temperatura ha sido excelente. Verdaderamente ha sido un lujo", afirmó Etxaburu visiblemente emocionada.

Dentro de los debutantes, destacó la presencia de Silvia Ocaña, que logró terminar quinta en su primera participación en la carrera. "La verdad es que me he encontrado muy bien durante todo el recorrido, el viento nos ha complicado un poco la tarea, pero la motivación de llegar hasta aquí es mucho mayor que cualquier tipo de impedimento. Espero repetir el próximo año porque me ha gustado mucho".

A su vez, Iñaki Chavarría mejoró su experiencia del año pasado al repetir, con sensaciones mucho más positivas, presencia en la carrera. "Es una prueba muy dura, desde las primeras rampas las cosas se ponen complicadas, y hoy, con el viento en contra, hemos encontrado más dificultades". Sin embargo, Chavarría se mostró muy satisfecho con su rendimiento con respecto a la pasada edición. "Es la segunda ocasión que la disputo, el año pasado no salí nada contento, y este año me ha salido casi todo a pedir de boca", garantizó.

EL FÚTBOL NAVARRO, PRESENTE El arbitraje navarro también tuvo representación dentro de los participantes de la tercera edición de La Conquista del Castillo. Borja Munárriz y Javier Fernández, ambos colegiados del grupo navarro de Tercera División, quisieron conocer la prueba y quedaron gratamente satisfechos con el recorrido. "No conocíamos la prueba, y a pesar de la dureza de las primeras rampas, es realmente bonita", coincidieron ambos. Por tercer año consecutivo, La Conquista del Castillo volvió a mostrar el rostro gratificante de cientos de corredores que llegaron emocionados al Castillo de Javier.