- El domingo se disputaron en el Frontón Labrit las finales del Campeonato Navarro de Clubes en la modalidad de Paleta Goma dentro del Cinco y Medio, en el que han tomado parte un total de 73 pelotaris pertenecientes a trece clubes y divididos en tres categorías. Entre todos esos conjuntos destacaron el CD Larraina y el CD Frontón López, cuyos pelotaris se repartieron su presencia en todas las finales del cuadro.

Una de las circunstancias que más sorprendieron fue la juventud de algunos de los jugadores, sobre todo en segunda y tercera categoría, con finalistas de 17 y 14 años.

En tercera categoría, competencia que se estrenaba esta temporada, alcanzaron el encuentro definitivo Iosu Zubialde (CD Frontón López) y Mikel Iribarren, palista de 14 años del CD Larraina. Desde el saque inicial, el imberbe jugador del club de la cuesta que ha ganado todo en categorías inferiores, cogió el mando de las operaciones y Mikel el Rubio, como así denominan al pelotari de Larraina, se llevó la victoria por 25 a 12.

A continuación saltaron a la cancha Juan Fernández De Arcaya (CD Larraina) y Joseba Arizmendi (CD Frontón López), de nuevo bajo el síndrome de David y Goliat, habida cuenta de que Juan, de 17 años, 1, 73 metros de altura y 62 kilos de peso; tendría enfrente a Joseba, con 25 primaveras en el bolsillo, 185 centímetros de altura y 87 kilos de peso. En un encuentro competido, pese a diferencias de hasta ocho tantos (16-8), la victoria fue ajustada por 25-22 para Joseba.

La final de primera fue una lucha fratricida entre dos pelotaris del Frontón López: el jugador de Narbarte David Albiasu (conocido como Ha-zard por la rapidez con la que mueve las piernas a la hora de defender); y el correcaminos de Gartzaron, Xabier Legarra. Con estas credenciales el partido prometía grandes emociones y en verdad que el choque respondió a la previa con jugadas espectaculares, dos paredes milimétricos y alcanzadas inverosímiles por parte de ambos contendientes. A pesar de que Albiasu llegó a ir 19-8, el partido se le complicó. tras un parcial de 2-11, Un tanto por cabeza puso el partido en 20 a 22, momento en el que Albiasu buscó en lo más profundo de su alma los últimos vestigios de su fuerza para encadenar tres tantos que le llevaron a vencer 25-20 y calarse una txapela tan sufrida como justa.