ESPAÑA Pérez de Vargas; Solé (4, 2p), Raúl Entrerríos (3), Gedeón Guardiola (1), Marchán (-), Dani Dujshebaev (1) y Ariño (1) -equipo inicial-, Corrales (ps), Aleix Gómez (1p), Maqueda (3), Alex Dujshebaev (3), Sarmiento (2), Cañellas (4), Ángel Fernández (4), Figueras (2) y Morros (-).

BRASIL Rangek Luan; Chiuffa (1), Toledo (2), Patrianova (-), Langaro (7), Joao Silva (-) y Moraes (6) -equipo inicial-, Santos (ps), Almeida (ps), Henrique Teixeira (3), Vinicius Teixeira (-), Dutra (-), Luciano (-), Ponciano (-), Hackbarth(5, 3p), Rodrigues(5).

Marcador cada 5 minutos 0-3, 1-4, 4-6, 9-8, 11-10, 16-13 (descanso); 20-16, 24-19, 24-21, 26-23, 26-26 y 29-29.

Árbitros Pavicevic y Raznatovic (MNE). Excluyeron por dos minutos a Raúl Entrerríos, Morros, Cañellas y Dani Dujshebaev por España; y a Toledo, Dutra, Ponciano, Moraes y Rodrigues (2) por Brasil.

Pabellón Nueva Capital.

- Tropiezo de los Hispanos en el primer partido del Mundial. Y pudo ser peor ya que un gol de Raúl Entrerríos a falta de siete segundos para la conclusión del encuentro permitió a la selección española de balonmano lograr un agónico empate (29-29) ante Brasil, en un encuentro en el que los Hispanos empataron cuando lo tenían todo a favor.

Y es que nadie hubiera podido imaginar el marcador final en el arranque de una segunda mitad en la que los de Jordi Ribera, pese a los numerosos problemas que sufrieron en la primera parte, parecían encaminados a una cómoda victoria, tras situarse con una renta de seis goles (24-18) en el marcador.

Pero España no sólo no acabó de resolver sus problemas ofensivos, sino que además flaqueó en defensa, donde nunca encontró respuesta a los movimientos del gigantesco pivote brasileño Rogerio Moraes.