pamplona. La harinera Huici Leidan, de Olaz, ha solicitado concurso voluntario de acreedores y ha cesado en su actividad, previsiblemente de modo definitivo. La firma navarra, con 43 años de historia y que contaba con 44 trabajadores, se ve en la imposibilidad de continuar al no ser capaz de competir con los almidones de maíz, mucho más baratos desde hace ya unos años.
"Ahora mismo hay un diferencial cercano a los 40 euros por tonelada entre el maíz y el trigo", explicaban ayer desde dirección de la empresa, ubicada entre Olaz y Huarte y que se vio, además, gravemente afectada por la histórica inundación del pasado 9 de junio. Aquella mañana, el agua alcanzó alrededor de 1,70 metros en las instalaciones de la harinera, dedicada a la fabricación de almidón y gluten de trigo. El agua anegó el laboratorio y arruinó el material especializado de la compañía, que tardó dos semanas en reanudar su actividad. A esto se añadió una mala cosecha de cereal, producto del primer semestre más lluvioso desde que hay registros, y que generó un trigo de escasa calidad. "Hemos tenido un verano horrible", agregaban las mismas fuentes.
La reducción de los precios del maíz, que se situó entre 15 y 20 euros por debajo, condujo a la empresa a afrontar un problema de competitividad ya claro durante el año 2012. Este se fue agravando durante los últimos meses y, a juicio de los responsables, hacía imposible continuar con la actividad. "No somos competitivos ante el almidón de maíz y solo se generaban pérdidas", explicaban desde la dirección que consideraba que ante esto lo mejor era "cerrar". De este modo solicitaron el concurso de acreedores hace ya unas semanas con la intención de no incrementar la deuda y poder hacer frente "de un modo ordenado" a la salida de los trabajadores y a la previsible liquidación de la compañía.
El cierre de Huici Leidan supone la desaparición de la única empresa española de fabricación del almidón de trigo. Las otras tres plantas, notablemente más graves y ubicadas en Zaragoza, Martorell y Valencia, pertenecen a multinacionales.
El almidón de trigo fabricado en Olaz provee posteriormente a la industria del papel y se emplea también en la alimentación (mayonesas, bechameles), las colas y pegamentos y la cerveza. "Y la tecnología que se emplea no tiene nada que ver con la del maíz", explicaban desde la empresa para ilustrar las dificultades de reconversión.