MADRID. El supervisor decidía esta mañana suspender cautelarmente, con efectos inmediatos, la negociación de Tubos Reunidos a la espera de una información relevante. Unas horas después, Tubos Reunidos ha dado a conocer este principio de acuerdo sobre los términos y condiciones de la refinanciación de la deuda financiera de la sociedad y de sus filiales.

La empresa ya había anunciado en septiembre de 2018 que estaba trabajando con entidades financieras para adecuar su estructura de financiación y, con el objetivo de "reforzar" los objetivos de crecimiento y mejora en la evolución operativa que el grupo siderúrgico ya está desarrollando.

Tubos Reunidos tuvo unas pérdidas de 34,4 millones de euros el pasado año, lo que supone un 6% más que las contabilizadas en 2017. En el primer trimestre de este año las pérdidas fueron de 13,3 millones frente al beneficio de 4,7 millones del mismo periodo del año pasado, aunque apuntaba a "buenas perspectivas de recuperación".

Este martes Tubos Reunidos ha anunciado un principio de acuerdo, que está pendiente de ratificación final en los comités de las entidades y de su formalización documental. En concreto, se refinanciará la deuda financiera del Grupo Tubos Reunidos, que asciende a un importe de 351 millones a 30 de abril de 2019.

NUEVA ESTRUCTURA DE FINANCIACION

La nueva estructura de financiación constará de líneas de circulante comprometidas por importe aproximado de 92 millones, un tramo A de 85 millones con calendario de amortización creciente y un Bono A de 5 millones, ambos con vencimiento a cinco años prorrogables.

También se establecen tres tramos convertibles en acciones ordinarias de Tubos Reunidos, en determinados supuestos, con vencimiento bullet a seis años prorrogables, incluyendo como importes aproximados un tramo B de 122 millones, tramo C de 36 millones y un Bono B de 10 millones, cuyos intereses no serán pagaderos en caja, si no que incrementarán la cifra del principal a vencimiento o en un supuesto de conversión.

El grupo Tubos Reunidos ha señalado que, como resultado de este acuerdo de refinanciación, consigue racionalizar su deuda y contar con "mayor flexibilidad" en sus compromisos financieros, lo que, según ha destacado, "contribuirá a alcanzar los objetivos de su plan de negocio dentro de las actuales necesidades del mercado".

La empresa ha destacado que el acuerdo facilita la "viabilidad y estabilidad" del grupo en el corto y medio plazo dentro de "un incierto escenario de mercado", derivado de la aplicación de medidas arancelarias a las importaciones europeas de productos de acero en Estados Unidos.

Por lo tanto, ha afirmado que es un "acuerdo fundamental" para contribuir al "desarrollo futuro" del grupo, que, según ha manifestado, ha conseguido el respaldo de las principales entidades financieras acreedoras de Tubos Reunidos, lo que "coadyuva a la ejecución de su plan de negocio y, en consecuencia, a superar las difíciles condiciones actuales del mercado".

En concreto, fuentes de la compañía han subrayado a Europa Press la importancia de este acuerdo porque le da "estabilidad y flexibilidad interna".

Las mismas fuentes han indicado que era "estratégico" para el grupo alcanzar este principio de acuerdo, que, a su juicio, supone también un "respaldo total" a su plan de negocio.

Por una parte, supone "estabilidad" para la empresa porque le "permite un plan financiero a seis años" y también conlleva flexibilidad porque facilita al grupo "liquidez" y circulante de cara a afrontar las inversiones futuras.

Asimismo, han destacado que el hecho de que se considere que una parte de la deuda se va poder recuperar con su negocio supone, en opinión de la empresa, un "respaldo" a su plan de negocio. "Es un plan muy completo", han añadido.