Seinsa, empresa navarra líder del recambio del freno con sus marcas Autofren y ERT en Europa, prevé incrementar su facturación un 40% en los próximos tres años. Ubicada en Eugi, en el valle de Esteribar, vende por valor de 22 millones.
La pandemia del coronavirus sorprendió a esta compañía familiar en plena confección de su plan estratégico para 2021-2023, y le obligó a “revisar todos los objetivos proyectados para ese periodo”, recuerda Ander Azcárate Etxaniz, de 43 años y CEO del Grupo Azkaetxa, del que Seinsa es su matriz. Su hermano Mikel, de 50 años y director del recién creado departamento de Desarrollo Estratégico y Nuevos Negocios de Seinsa, también forma parte de la segunda generación de este negocio con casi cinco décadas de trayectoria.
El Grupo Azkaetxa está compuesto por las plantas de Eugi y Chennai (India), que fabrican productos de recambio; el centro de logística y envasado que recepciona estas piezas en Egüés; y Joycar, proveedor de moldes y troqueles. Más de 300 personas componen esta plantilla que son la clave de su modelo de “innovación integral”. José Antonio Azcárate Oroz, que sigue presidiendo el grupo a sus 77 años, impulsó esta cultura empresarial en 2006, que resumió en un lema: Nuestra gente, nuestro éxito. Sus hijos han continuado con este modelo de gestión participativo “para desarrollar el talento creativo como palanca para sus iniciativas innovadoras”, explica Ander.
Esta estrategia impulsó la creación de equipos de alto rendimiento innovador, los denominados EARI, compuestos por personal de las áreas de la empresa; incorporó a mujeres en puestos de liderazgo, en la dirección y en los cuadros intermedios; y acordó alianzas con universidades y centros tecnológicos para adquirir más conocimiento y tecnología. En este proceso la compañía trabajó con un equipo consultor multidisciplinar, liderado por Julen Ortiz de Murua, “referente en estos proyectos de innovación integral, basados en el modelo Ormur”, recuerda Mikel.
Este año la Agencia Vasca de la Innovación (Innobasque) ha reconocido su modelo integral de innovación basado en la persona, y lo ha incluido en el Banco de Proyectos Innovadores y de Buenas Prácticas para ponerlo a disposición de las empresas que quieran iniciar procesos de este tipo. José Antonio Azcárate se muestra satisfecho por esta distinción, ya que supone “un reconocimiento” a su manera de trabajar.
Desde el despacho en el que permaneció jornadas maratonianas durante 30 años para posicionar su marca Autofren como un referente en el mercado del recambio del freno, José Antonio Azcárate considera que su gran acierto fue “afrontar en vida la transición del negocio” a sus hijos Ander y Mikel. Ambos escuchan las palabras de su progenitor que pronuncia ante la mirada atenta de su mujer, Mentxu Etxaniz Ibarra, que “ha supuesto un pilar importante” para este negocio. “Ella se ocupaba de la familia -que se completa con su hija Ainhoa-, mientras yo dirigía la compañía”, recalca José Antonio. Todos, ataviados con la mascarilla, guardan las distancias de seguridad, con la puerta del despacho abierta y un hidrogel encima de la mesa de trabajo. “Aguantamos el chaparrón de abril y mayo con una reducción del 50% de la facturación por la covid. No paramos porque nos catalogaron como industria esencial, pero tuvimos que aplicar un ERTE”, rememora Ander.
El 98% de su facturación depende de la exportación a 83 marcas distribuidas en 75 países. “Detectamos el desigual desconfinamiento en los países a través de la recuperación escalonada de los mercados en el exterior. Desde junio remontamos en ventas y cerraremos el ejercicio con una facturación semejante a 2019. Ahora nos encontramos en un momento dulce”, detalla Ander. Seinsa factura 22 millos de los más de 30 millones del Grupo Azkaetxa.
Sin embargo, estos dos hermanos se han marcado crecer un 20% en 2021; y un 10% tanto en 2022 como en 2023 mediante la ampliación de su negocio en el mercado indio y en todo el continente americano. “Actualmente Europa soporta el 80% de la facturación, principalmente los países del Este porque el frío deteriora antes los frenos”, especifica Mikel.
Para cumplir con este plan estratégico, ampliarán la capacidad productiva y empleo en la planta de Chennai y estudian “la posibilidad de implantarse en México a través de alianzas con futuros clientes locales”, aclara Mikel. Como Seinsa se encuadra en el segundo escalón de la industria de la automoción, “los próximos años complicados se presentan de oportunidad para el recambio porque el parque de vehículos tarda más en renovarse”, explica Ander.
El departamento de Desarrollo Estratégico y Nuevos Negocios está compuesto por nueve profesionales jóvenes multidisciplinares de la casa, “sin tener que buscar fuera”, recalca Mikel. “Este equipo EARI será los ojos del grupo a medio y largo plazo, porque va a captar oportunidades estratégicas de mercados y de posibles negocios y productos”, insiste el director de este departamento.
Seinsa continuará con su modelo basado en la innovación integral y sostenida a todos los niveles. “Por ejemplo, cuando nos acercamos a nuevos mercados, trabajamos una red de interlocución entre clientes y proveedores para crear espacios compartidos en los que buscamos experiencias y un crecimiento mutuo”, concluye Mikel, que junto a su hermano Ander suman ya 22 años al frente de este negocio, y los que les quedan.
