- La contratación en Navarra se ha desplomado entre enero y noviembre a niveles de 2014, debido a la situación de la pandemia del coronavirus que ha derivado en una crisis económica sin precedentes. Ha paralizado actividades durante unos meses, que se han reiniciado con restricciones que todavía continúan e impiden que se recuperen, se han mantenido otros sectores pero a un ritmo menor y este escenario ha impactado de lleno en el consumo, a pesar de que los ERTE han podido frenar en parte su caída. El Observatorio de la Realidad Social informa de que la Comunidad Foral registró hasta noviembre 279.500 contratos, una cifra que rompe la racha de incrementos consecutivos de la contratación en Navarra desde 2013, y que la sitúa en niveles de hace seis años.
La pandemia ha perjudicado a todos los sectores, y en todos ellos se han producido descensos entre enero y noviembre: la agricultura sufre una caída del 9,6%; la industria, del 15%; la construcción, del 22%; y servicios, del 30,5%, el más castigado debido a que negocios tradicionales de este sector han padecido, en primer lugar, su cierre temporal durante el confinamiento cuando se proclamó el estado de alarma el 14 de marzo, y restricciones de diferentes niveles desde junio hasta ahora. La campaña de Navidad es una de las épocas propicias para la contratación, pero este año debido a la segunda ola del coronavirus y a las medidas que han adoptado los diferentes gobiernos para atajarla han repercutido en una disminución de la demanda de empleo durante estas semanas. La Comunidad Foral contratará un 15% menos que en 2019.
La covid ha frenado los incrementos consecutivos de la contratación que ha experimentado Navarra desde 2013. El año pasado se contabilizó el récord de casi 371.000 relaciones contractuales en doce meses. Un aumento con dos lecturas, una positiva y otra negativa. La primera está relacionada con una mejora de la economía, que tras dos recesiones, comenzó a crecer; pero la otra se explica por la reforma laboral de 2012, aprobada por el Gobierno del PP, a través de la cual proliferaron contratos más precarios, caracterizados por la temporalidad, parcialidad y escasa duración -los de siete o menos días llegaron a superar el 40% del total inscritos-. Esta situación favoreció a que aumentara el índice de rotación contractual (el número de contratos por persona) del 2,62 en 2012 al 3,2 en 2019.
Pero, este año la aparición de la pandemia en marzo trajo una crisis que ha golpeado a la economía, y desde entonces, todos los meses Navarra ha contabilizado descensos en el número de contratos respecto a 2019, sin una variación de la temporalidad e indefinidos, ya que el porcentaje de la eventualidad se queda en el 93,5% como en el ejercicio pasado. Las previsiones de las entidades financieras señalan que el PIB foral crecerá en torno al 6% en 2021, una mejoría que favorecerá una recuperación de la contratación, pero todavía no a los niveles anteriores a la actual crisis.
EVOLUCIÓN DE LA CONTRATACIÓN DESDE 2010:
Año/Contratos hasta noviembre
2020279.500
Fuente: Observatorio de la Realidad Social
Meses/Nº contratos ()*
Noviembre26.559 (-4.723)
Fuente: Observatorio de la Realidad Social. *Entre paréntesis, la variación de contratos respecto al mismo mes del año anterior
160.868
El sector servicios ha registrado entre enero y noviembre en Navarra un total de 160.868 contratos este año, una cifra que supone un 30,5% menos que en el mismo periodo del año anterior, según el Observatorio de la Realidad Social.
92.544
La industria ha sufrido una disminución del 15% de la contratación. El año pasado en los mismos meses acumuló 108.987 relaciones contractuales.
18.069
El sector primario se presenta como la actividad con menos bajada, de un 9,6%, al contabilizar 18.069 contratos en los primeros once meses del año por los 20.008 de un año antes.
8.019
Por ahora, no ha padecido este año como en la crisis de 2008. Si en 2020 generó 8.019 contratos, en 2019 fueron casi 11.000.
