La inversión en I+D, uno de esos indicadores que anticipan la prosperidad futura, sigue débil en Navarra. Crece, es verdad, pero lo hace con cierta lentitud, dilatando la consecución de un viejo objetivo muchas veces postergado: alcanzar el 3% del PIB, , donde ya se mueven hace años la economías más desarrolladas del mundo, y que se convertirá en una obligación legal en 2030.

Los datos de 2022, recién publicados, no muestran un cambio sustancial en la trayectoria. Según el Instituto Nacional de Estadística, Navarra invirtió 409,9 millones de euros el año pasado, la cifra más alta de la historia y un 5,1% más que el año anterior. Supone un 2.1% del total invertido en España, un dato que refleja que la intensidad de la actividad innovadora navarra es superior a la media, pero que no esconde también una cierta pérdida de pujanza. En 2021, Navarra supuso el 2,3% del total, pero, en los últimos 12 meses, la inversión ha crecido mucho más en el conjunto del país (un 12%) que en Navarra, por lo que el peso respecto al total se reduce.

A falta de que Nastat ofrezca los datos detallados, los 409 millones suponen alrededor del 1,93% del PIB, lo que supone un crecimiento de algo más de una décima respecto a 2021, cuando se quedó en el 1,76%, frente al 2,27% de media de la Unión Europea. En Alemania supera ya el 3%, como en Estados Unidos y Japón. Corea, mientras tanto, se aproxima ya al 5%. 

La explicación al dato de Navarra, que sin ser malo sí resulta insuficiente, no se encuentran en el impulso público, que en Navarra es notable y soporta más de una tercera parte de la inversión total, sino en el desempeño del sector privado. Las empresas invirtieron el año pasado, según el INE, 270 millones de euros en I+D+1, unos 16 millones de euros más que en 2021, lo que supone un crecimiento superior al 6% respecto al año anterior. 

El Gobierno de Navarra optó por realizar una valoración más positiva y, en una nota, destacó que, en términos de gasto por persona, Navarra, con 610,1 euros, se situó en 2022 como la cuarta Comunidad con mayor gasto en I+D interna por habitante, con una cifra muy superior a la media nacional, que se establece en 402,2 euros. En el capítulo del personal, un total de 5.346 personas se dedicaron a actividades de I+D en equivalencia a jornada completa en 2022, aumentando un 0,9% respecto al año anterior, ha informado el Gobierno foral.

En este sentido, el consejero Cigudosa mencionó de forma positiva todos estos datos que “evidencian la buena marcha de la Comunidad Foral y el compromiso del Gobierno de Navarra en materia de innovación, uno de los motores que nos acercan a un futuro mucho más brillante”

Además, durante su intervención, el consejero también ha puesto en valor la necesidad de contar con foros de dialogo como Ecosistemas de Innovación, "un escenario donde intercambiar experiencias, establecer sinergias y construir un entorno propicio para la innovación".

Del mismo modo, Cigudosa ha recordado que el departamento de Universidad, Innovación y Transformación Digital ha implantado "medidas significativas para fortalecer la investigación y el desarrollo en Navarra", con programas de atracción de talento y nuevos esquemas de financiación basal para agentes del Sistema Navarro de I+D+i (SINAI).

También, el consejero ha señalado que durante el pasado año se ha realizado "una actualización exhaustiva" del cuadro de mando del Plan de Ciencia, Tecnología e Innovación de Navarra, que ha permitido "una visión más detallada y actualizada del punto en el que nos encontramos en nuestra Comunidad, permitiéndonos trazar estrategias efectivas hacia el futuro".  

Ecosistemas de innovación

La iniciativa 'Ecosistemas de Innovación', promovida por el departamento de Universidad, Innovación y Transformación Digital y organizada por ADItech, coordinador del SINAI, nació en 2020 con el propósito de consolidar en el tiempo una vía de comunicación directa y colaborativa entre el mundo empresarial, el SINAI y la Administración. Así, se partió de la necesidad de definir una estrategia común hasta 2030, con objetivos realizables a corto, medio y largo plazo, que sirviera para focalizar los esfuerzos, trabajar en una misma dirección y generar una mayor competitividad.

En este sentido, aunque el punto de partida siempre es diferente para cada sector, se identificaron necesidades comunes, que daban lugar a una serie de acciones encaminadas a favorecer una estrategia de especialización inteligente; fomentar una dinámica de cooperación intersectorial e intrasectorial; promover una innovación basada en retos, con proyectos piloto y experimentación real; definir una estrategia de gestión del talento; facilitar las relaciones comerciales entre empresas y la compra pública innovadora.

Esta novena jornada de 'Ecosistemas de Innovación', celebrada en el Palacio de Congresos y Auditorio de Baluarte, se ha centrado en identificar, analizar y superar las barreras para obtener mejoras en el ámbito de la innovación. Además, se han celebrado varias mesas redondas en las que también han participado la directora general de Ciencia, Tecnología e Innovación, Agurtzane Martínez Ortigosa; la directora general de Energía, I+D+i Empresarial y Emprendimiento, Uxue Itoiz Mariñelarena; así como la responsable de Cooperación Tecnológica y Promoción de la I+D+i Empresarial de ADItech, María Uresandi Arive. Tras las mesas, el director general de ADItech, Diego Garrido Vidal, ha expuesto las conclusiones de la jornada.