Este mes 14 empresas navarras renovables viajaron a Texas para gestar oportunidades de negocio, y estuvieron acompañadas del consejero de Industria y Transición Ecológica y Digital Empresarial, Mikel Irujo. Este estado aporta el 9,25% del PIB de EEUU y genera electricidad a partir de fuentes renovables, siendo líder en energía eólica. La misión comercial visitó Houston.

“Los representantes de las entidades con las que nos reunimos repetían que Texas y Houston son los mejores sitios del mundo para invertir. Tampoco incidían en un motivo concreto, exponían las ventajas de su fiscalidad, casi inexistente, pero no advertían del coste elevado del alquiler de locales o viviendas. Con esto quiero decir que muchos sitios se sienten orgullosos de sí mismos, y echo en falta esa actitud en Navarra”, explica Irujo, en la sala de reuniones de su departamento.

“No podemos anclarnos en discursos del siglo XX, basados solo en las infraestructuras y en la fiscalidad”

Un mapamundi ocupa una de las paredes de la estancia –para recordar que Navarra debe competir en un mercado global–, colindante con una cristalera desde la que se observa el parque eólico experimental de Cener en Alaiz.

“Casi ninguna parte de Europa cuenta con un espacio al aire libre para que los constructores de molinos puedan ensayar sus prototipos”, ejemplifica. Este sector contribuye junto a otras actividades para que la industria represente el 30% del PIB foral, un porcentaje que pocas regiones de la UE poseen.

“Navarra se ha convertido en una isla, porque su industria ha crecido en las últimas décadas, a diferencia de lo que está ocurriendo en Europa y en el resto del Mundo. Ahí están los datos para consultar”, insiste el consejero para desmontar “el mensaje que difunde el sector empresarial de que en Navarra la industria retrocede y se encuentra en decadencia”.

Esta semana Mikel Irujo asistió a la toma de posesión del nuevo presidente de la Confederación Empresarial Navarra (CEN), Manuel Piquer, que al igual que su antecesor, incidió en las infraestructuras y fiscalidad como pilares para el crecimiento de las empresas en la Comunidad Foral.

Siete organizaciones empresariales han presentado un documento con propuestas para la futura ley de industria, recogidas en cuatro bloques, entre ellos infraestructuras y fiscalidad. ¿Qué opina?

No podemos anclarnos en discursos del siglo XX, basados solo en las infraestructuras y la fiscalidad. Debemos tener una visión más amplia, con una mirada a la fotografía en toda su dimensión.

Pero la autonomía fiscal siempre es una herramienta para captar nuevas inversiones.

Sí, pero este debate debe afrontarse de manera serena. La fiscalidad se convierte en esa hoja que no deja ver el resto del bosque. La fiscalidad es importante pero tanto como el resto de cuestiones tratadas en las nueve mesas de trabajo para confeccionar la futura ley de industria.

“Puede que la apuesta en marcha de parques renovables se retrase al término de la legislatura, por un cambio de norma en el Estado”

Sin embargo, Navarra no sale bien parada en el dato de cambio de domicilio fiscal.

El dato preocupa. Sin embargo, la CAV ofrece peores cifras que Navarra en esta cuestión, y eso que su fiscalidad es menos intensiva con la industria y las empresas. Con ello quiero decir que cuando una empresa decide trasladar su domicilio fiscal fuera de la Comunidad concurren otros factores, no solo el fiscal en exclusividad.

Los empresarios han reclamado la urgencia del TAV, del Canal y de un aeropuerto con conexiones. ¿Cuál es su respuesta ante esta demanda?

Voy a introducir un debate en el que mucha gente no se siente cómoda: el modelo territorial del Estado; y voy a explicarlo con un ejemplo. La Moncloa, da igual el color que esté, ha invertido 10.000 millones de euros en el siglo XXI en el aeropuerto de Barajas; en cambio, en el mismo periodo de tiempo el de Noáin-Pamplona ha recibido 33 millones. Competir así resulta complicado, y lo que ocurre en el sector aéreo puede trasladarse a otras infraestructuras. Ya estamos trabajando para recuperar el vuelo a Frankfurt, pero el problema es otro.

Antes ha mencionado que no hay que anclarse en discursos del siglo XX, ¿en qué se basa ese discurso industrial del siglo XXI?

La Unión Europea ha fijado la industria como eje prioritario entre sus estrategias. Una reindustrialización que ha basado en la transición ecológica y digital empresarial. De ahí el cambio del nombre de la consejería para esta legislatura. Por ejemplo, la industria en Francia representa el 11% del PIB, ha perdido músculo de manera alarmante. En cambio, Navarra va contracorriente porque supone el 30% de la economía y el plan industrial hasta 2025 se ha puesto como objetivo crecer hasta el 32%.

¿Por qué Navarra goza de esta posición?

Porque, entre otros motivos, el Gobierno ha apostado y cuidado la industria y ha fortalecido el ecosistema. La futura ley foral de industria se basa en dos ejes: las transiciones ecológica y digital para visionar la futura Navarra. Estas transiciones llegan como un tsunami.

“Sunsundegui tiene una oportunidad histórica para su planta, ya que ha logrado la confianza y compromiso financiero de Volvo”

¿En qué deben trabajar las empresas para afrontar la transición ecológica?

En descarbonizar la economía para favorecer la competitividad, ya que todavía temblamos con lo ocurrido en 2022 tras la invasión de Rusia a Ucrania. Los precios del gas y de los hidrocarburos subieron a un ritmo que no se conocía desde hace 40 años. Además, las empresas deben introducir la economía circular en su actividad ante la escasez de materias primas en el continente, aunque este modelo va más lento. La economía circular impulsa las cuatro erres: reciclar, rediseñar, reutilizar y revalorizar.

Esta semana en comisión ofreció un dato alarmante sobre la digitalización: casi el 59% de empresas no ven beneficios asociados a la transformación digital. ¿Preocupado por esta respuesta?

Sí, hay que concienciar. Si perdemos la carrera de la digitalización, la descarbonización y la economía circular no avanzan. Por ejemplo, dentro de poco se va a poner en marcha el pasaporte digital, una herramienta a través de la cual los consumidores tendrán derecho a conocer la trazabilidad de cualquier producto. Este paso obliga a una digitalización absoluta de las empresas.

¿Cuándo se conocerá el borrador de la ley foral de industria?

El 2 de septiembre, jornada que celebra el Día Internacional de la Industria, presentaremos el primer borrador; y posteriormente regresará al proceso de participación.

Han contado con todos los agentes para que aporten sus ideas.

Agradezco el trabajo en común de todos los participantes. El texto confeccionado surgirá de la colaboración de todos los sectores de la economía. El origen de la ley se ha basado en la participación.

“La compra de eléctricos crece por la rápida gestión de las ayudas en la Administración foral y por las deducciones fiscales desde 2018”

¿Qué han debatido?

En el primer trimestre se formaron nueve mesas de trabajo, para abordar temáticas diversas, como gobernanza; valores; personas; infraestructuras; la doble transición ecológica y digital; el talento, la inversión, el emprendimiento y la I+D; la simplificación de la Administración; y la financiación y fiscalidad. Cada mesa ha realizado tres reuniones, por lo que al final se han producido 27 encuentros. Todas las materias tratadas resultan importantes para la futura ley foral de industria, no hay una cuestión más relevante que otra. El análisis de estos tres meses ya está confeccionado, e internamente convocaremos a los grupos de trabajo para mostrar los resultados.

¿La combinación de todos los temas tratados crean una región atractiva para invertir?

Sí. Además, existen proyectos tangibles que muestran que en Navarra se invierte: si hacemos el sumatorio desde 2021, hay 3.000 millones de euros comprometidos, mil millones de VW Navarra para la electrificación de la planta, otros mil millones en iniciativas industriales y otros mil millones de los 34 parques eólicos y fotovoltaicos. Además, estas empresas se han distribuido por todo el territorio para evitar la concentración en Pamplona.

¿3.000 millones se puede considerar una apuesta clara por este territorio?

A raíz de esta pregunta me gustaría hacer una reflexión. En Navarra existe una línea roja que debe superarse: desde el sector empresarial, lo digo con mucha tristeza, hay una sensación de que en Navarra vamos para atrás y los datos muestran todo lo contrario. En nuestra comunidad el discurso está muy confundido; y creo que una persona puede hablar de manera orgullosa de su territorio y, al mismo tiempo, criticar la acción o inacción del Gobierno.

Irujo, en un momento de la entrevista. Javier Bergasa

Las nuevas iniciativas empresariales conviven con las asentadas: Sunsundegui es una de ellas, ¿pero le ha traído muchos quebraderos de cabeza?

El Gobierno de Navarra, a través de Sodena, ha apostado por esta planta, clave para el empleo en Sakana. Sunsundegui tiene una oportunidad histórica, ya que ha logrado la confianza y el compromiso financiero demostrado de Volvo, y eso se considera un punto de inflexión para pensar en que la carrocera afronta un futuro estable. Además, esta misma semana hemos conocido que el mayor carrocero europeo, la firma belga Van Hool, ha quebrado.

Y la última en apuros Dynamobel.

Sí, este jueves el pleno del Parlamento aprobó un proyecto de ley foral por el que autoriza a Sodena aportar al capital social de Dynamobel dos millones y otorgar un aval de hasta dos millones.

“La UE fija la industria como un eje estratégico, sustentada en las transiciones ecológica y digital, que llegan como un tsunami”

¿En qué situación se encuentra la compañía?

Tras varias reestructuraciones, en 2023 Dynamobel estaba cumpliendo escrupulosamente el plan, pero sufrió un ciberataque que paralizó la planta tres meses. A pesar de ello, cerraron con un ebitda positivo, lo que significa que internamente han ordenado las cuentas con la responsabilidad de la plantilla, que asumió una rebaja salarial, y la del propietario que puso capital.

¿Y Siemens Gamesa sigue preocupando?

Sí. El mercado renovable va a crecer y resulta una paradoja que empresas como Siemens Gamesa se encuentren en esta situación. A una compañía así, Navarra le ofrece un ecosistema completo del sector renovable, una fotografía que cualquier región europea no dispone: desde zonas de testeo hasta personal altamente cualificado en toda la cadena de valor.

“Si perdemos la carrera de la digitalización, la descarbonización y la economía circular no avanzarán en Navarra”

Esta semana Amazon ha anunciado dos proyectos solares en Navarra, ¿qué sabe de esto?

Todavía nada.

¿Cómo va el ritmo de tramitación de los 34 parques renovables, entre eólicos y fotovoltaicos?

La mayoría tiene el permiso para construir. Pero el Ministerio aprobó en diciembre la posibilidad de prorrogar la construcción como la puesta en marcha, debido a que 2023 se caracterizó por ser un año de bloqueo industrial, falta de materias primas, retrasos en las entregas de pedidos, etc. Ante esa situación, se ha flexibilizado la obligación de poner en marcha el proyecto renovable dos años y medio después de obtener la autorización administrativa previa. Si atendemos a esta norma, puede que la entrada en funcionamiento de los parques se retrasa al término de la legislatura en 2027.

Hace unos días anunció su departamento una ampliación de 1,5 millones de euros más en el Plan Moves. ¿Un 10% de penetración de eléctrico en Navarra es suficiente?

Es más que la media en España; pero no alcanzamos la media de muchos países de la UE, como Noruega que ya suponen más de la mitad.

¿Por qué en Navarra funciona mejor la compra de eléctricos que en el resto de comunidades?

Faconauto ha puesto en valor la rápida gestión de las ayudas que realiza la Administración foral, algo que no ocurre en otros territorios y eso desanima a la hora de comprar. A esto hay que unir la visión del Gobierno de Navarra, ya que en 2018 aprobó deducciones directas en el IRPF o en el Impuesto de Sociedades, cuando el vehículo eléctrico sonaba a ciencia ficción. Además la adquisición de eléctricos está siendo mayor en grandes núcleos urbanos, de los que carece la Comunidad Foral, por eso hay que valorar que a pesar de ello, las matriculaciones aquí siguen creciendo.