Viscofan proyecta una planta fotovoltaica de autoconsumo en su factoría de Cáseda en una extensión de cien hectáreas, entre terreno particular y comunal, que la va a convertir en la más grande del sector industrial en la Comunidad Foral.

Estas cien hectáreas equivalen a unos 200 campos de fútbol. No ha trascendido a cuánto va a ascender esta inversión, pero los promotores esperan iniciar los trabajos de construcción el próximo 2025.

El Gobierno de Navarra ha adoptado, en su sesión de este miércoles, un acuerdo por el que se declara como inversión de interés foral el proyecto para que Acciona Energía construya esta planta fotovoltaica para autoconsumo de 48,11 MWp, una instalación que forma parte del plan de descarbonización del centro productivo de Viscofan en el término municipal de Cáseda.

La empresa estima que la energía renovable de la nueva planta evitará la emisión de más de 50.000 toneladas de C02 a la atmósfera al año. El consejero de Industria y Transición Ecológica y Digital Empresarial, Mikel Irujo, ha recordado que Viscofan es "la mayor consumidora de energía en Navarra, por lo que este proyecto encaja en la estrategia de transición ecológica".

La planta generará 269 puestos en la fase de construcción y cuatro cuando ya esté operativa, incluyendo empleos directos, indirectos e inducidos.

La nueva planta fotovoltaica en Navarra que generará 269 empleos DIARIO DE NOTICIAS

Irujo ha destacado la importancia de este tipo de intervenciones, que “permiten la descarbonización del sector industrial, en línea con el Plan Energético de Navarra Horizonte 2030, y también la digitalización y la diversificación en el consumo energético, al mismo tiempo que se optimizan los costes de la empresa”. También ha nombrado que va en línea con el informe presentado por Mario Draghi sobre la competitividad de la industria europea ante EEUU y China.

Motor económico en una zona en peligro de despoblación

Según Irujo, el proyecto contribuye también a reforzar la actividad de una empresa que ejerce como “motor económico de un área afectada por la despoblación y el reto demográfico, área de intervención prioritaria del Ejecutivo foral (el 65% de la plantilla de Viscofan procede de Cáseda, Aibar, Gallipienzo, Lerga, Eslava, Sos y Javier, núcleos de menos de mil habitantes, y de Lumbier y Sangüesa, de menos de 5.000 habitantes)”.

Viscofan es una compañía líder a nivel mundial en el sector de las envolturas para la industria alimentaria, que distribuye sus productos en más de cien países.

La planta de autoconsumo forma parte de su plan de descarbonización, que incluye la electrificación de procesos que actualmente son realizados con consumo de combustibles fósiles.

Según la memoria presentada por Viscofan para solicitar que esta instalación sea declarada inversión de interés foral, la planta se pondrá en marcha con la colaboración de Acciona Energía, mediante la instalación de un sistema de autoconsumo fotovoltaico de 48,11 MW, junto con las infraestructuras necesarias para su conexión a la red interior en sus instalaciones de Cáseda.

Acciona gestionará la instalación

La empresa contrata el servicio de suministro de electricidad limpia a largo plazo, de forma que es Acciona Energía la que realizará la operación y mantenimiento del sistema de autoconsumo fotovoltaico, que junto con unas nuevas calderas eléctricas permitirá obtener la energía térmica que requiere el proceso industrial mediante la sustitución del gas consumido en calderas convencionales por energía eléctrica.

(i-d) Jesús Calavia, Chief Operations Officer del Grupo Viscofan; Iñigo Martínez, director general de Viscofan España; José Antonio Canales, CEO del Grupo Viscofan; Rafael Mateo Alcalá, CEO de Acciona Energía; David Liste, director de Acciona Energía; y Alan Ripa, CEO de Acciona Plug. cedida

Reducción de emisiones de CO2

Está previsto que la instalación de las calderas eléctricas pase a consumir la energía generada por la planta fotovoltaica. El cambio a calderas eléctricas con suministro desde la planta fotovoltaica supone una importante reducción en las emisiones de CO2, de 17.360 y 32.946 toneladas al año, respectivamente, teniendo en cuenta las emisiones evitadas por la sustitución de calderas de gas y la generación eléctrica renovable respecto al mix energético.

Sede de Viscofan en Cáseda.

En el apartado de análisis de impacto social y económico del proyecto, la empresa destaca que destinará 0,3% de los costes de ingeniería y construcción de la planta y el 0,2% del valor de las ventas del proyecto en el año anterior, durante los 10 primeros años de la operación de la instalación, que pueda revertir en beneficio de todos los vecinos y vecinas. Además, la cesión de los comunales afectados por la Instalación supondrán unos ingresos extraordinarios para el municipio de Cáseda.

La empresa inició el pasado mes de marzo los trámites para obtener la preceptiva autorización de la Administración General del Estado para promover esta planta, que se suma a otra instalación que ya tiene, acogida a la modalidad de cogeneración todo-todo de 48 MW.