La limpiadora María Elena Escudero de 56 años ha entrado en silla de ruedas a su puesto de trabajo en el centro escolar Mendigoiti en el barrio pamplonés de Mendillorri.
Si este miércoles la empresa Zaintzen le notificaba vía mensaje al móvil que no acudiera a su puesto de trabajo porque estaba pendiente de recibir el informe de aptitud para valorar su puesto, este jueves la dirección le ha informado de que ya contaba con los papeles correspondientes y que debía regresar a su empleo esta tarde.
El sindicato LAB ha comunicado que esta trabajadora se ha desplazado hasta el centro escolar para entrar a las 16.00 horas. En silla de ruedas ha accedido al colegio en el que desarrolla tareas de limpieza. "Allí un responsable de la empresa y un técnico de prevención laboral le han explicado sus funciones de acuerdo a sus condiciones", ha contado el sindicato.
Protesta
Una veintena de sindicalistas y ciudadanos se han concentrado en las afueras de este centro para protestar y defender la salud laboral. El lema, Con la salud no se juega, se leía en la pancarta que portaban los sindicalistas.
En una nota, el sindicato LAB ha contado que dentro del centro, "Escudero y las asesoras de LAB han mantenido un fuerte debate con los responsables de la empresa Zaintzen que -a juicio de este sindicato- han demostrado que no tenían voluntad para reconducir la situación de la trabajadora de una manera práctica y adecuada desde el punto de vista de la salud laboral".
Entrega de material de trabajo
Según LAB, "los responsables de la empresa le han indicado que tenía que quedarse sola en el centro de trabajo". Ante esa situación, como María Elena Escudero se mueve en la silla de ruedas con la ayuda de otra persona, "ha decidido abandonar el lugar", ha manifestado el sindicato. La empresa ha entregado el material estándar para la limpieza y ha intentado que desarrollara su jornada con normalidad. "No ha habido empatía", ha calificado el sindicato.
"Flexibilizar la baja"
El portavoz del sindicato, Imanol Karrera, ha explicado que la imagen que se ha visto este jueves refleja la intención de la ministra Elma Saiz de “flexibilizar” las bajas como ha anunciado este mismo día. "Parece que a partir de ahora, aunque los empleados estemos de baja, tendremos que aceptar ir a trabajar en un andador o en una silla de ruedas", ha detallado Karrera.
Además, los congregados en Mendillorri han vuelto a recordar que la limpiadora María Ángeles Andrés de 56 años también acude a su puesto de trabajo en andador en otro centro de Pamplona.