A lo largo de su trayectoria, Navarra ha demostrado ser una región capaz de resistir y evolucionar, destacándose por su capacidad para innovar y adaptarse a los cambios del entorno. Su sector industrial, que actualmente representa el 31% del PIB regional y reúne a más de 3.000 empresas, ha sido un eje fundamental en este proceso de transformación continua. Este sector no solo dinamiza la economía local, sino que también es un generador clave de empleo y un catalizador de progreso social.

Frente a los desafíos actuales como la digitalización, la inteligencia artificial y la sostenibilidad, Navarra ha puesto en marcha la Estrategia S4, con el objetivo de fortalecer su competitividad y consolidarse como un referente europeo. En sintonía con esta estrategia, la reciente Ley Foral de Industria pretende acelerar este cambio, impulsando la doble transición ecológica y digital, además de introducir medidas para simplificar y agilizar los procesos administrativos, esenciales para adaptarse a las nuevas exigencias del mercado global.

En este marco, Mikel Irujo, consejero de Industria y Transición Ecológica y Digital del Gobierno de Navarra, intervino en el Foro Hiria organizado por DIARIO DE NOTICIAS con el patrocinio de Laboral Kutxa y el Gobierno de Navarra, en colaboración con AIN y Aena, subrayando la necesidad de “cuidar y fomentar nuestro tejido industrial”, asegurando que la industria debe ser el foco de los esfuerzos regionales y europeos.

“Estamos viviendo un momento de transición”, comenzó afirmando Irujo, situando a Navarra como una región que ha sabido mantenerse a contracorriente de las tendencias globales de desindustrialización que han afectado a gran parte de Europa y otros países como Canadá o Francia. “Nuestra industria supone el 31% del PIB, muy por encima del promedio europeo del 18% y mucho más elevado que el 11% de Francia, donde acaban de aprobar una ley para evitar que este porcentaje siga disminuyendo”.

Irujo expuso que, durante las últimas décadas, gran parte de la producción industrial europea se trasladó a Asia con la errónea creencia de que la tecnología y el conocimiento técnico nunca serían replicados en esos mercados. “Ahora, después de 20 años, nos damos cuenta de que esa no era la estrategia correcta”, reconoció. Aunque el traslado fue impulsado por el bajo costo de producción en Asia, el consejero enfatizó que la calidad europea sigue siendo superior y que este es un debate ya superado en el continente. “Europa ha reflexionado y ha entendido que su fortaleza reside en la calidad”, aseguró.

La necesidad de una doble transición ecológica y digital fue otro de los puntos clave de su intervención. Irujo remarcó que la apuesta por la sostenibilidad y la digitalización no solo es un consenso político en la UE, sino también una decisión comercial, dado que la inversión en tecnología verde se ha multiplicado por diez en los últimos años. Sin embargo, reconoció que la Unión Europea todavía enfrenta importantes limitaciones en términos de digitalización, destacando que no se ha alcanzado el nivel necesario para competir en el mercado global.

Un ecosistema robusto

El consejero también citó el informe Draghi, que revela con datos concretos la magnitud de los desafíos que enfrenta Europa, como el incremento del 500% en las importaciones chinas en la última década, lo que pone de relieve la urgencia de un cambio de paradigma.

En este sentido, Irujo subrayó que Europa ha pasado de representar un tercio del mercado mundial en 2005 a apenas el 18% en la actualidad, una disminución no tanto por decrecimiento, sino por el rápido avance de otros mercados, especialmente en Asia. “Somos solo el 6% de la población mundial, y ese dato también limita nuestro crecimiento”, explicó.

Pese a estos retos, Navarra ha logrado mantener un ecosistema industrial robusto, compuesto por servicios, recursos y una fuerte conexión entre sus universidades y centros tecnológicos con el desarrollo industrial de la región. Este tejido de colaboración ha sido clave para sostener el crecimiento y fomentar la innovación, con una de las mejores tasas de emprendimiento de Europa y sólidos programas de internacionalización.

Finalmente, Irujo destacó la importancia de los valores arraigados en las empresas navarras, con un fuerte compromiso con el territorio y el desarrollo personal. “El arraigo es evidente en el 100% de las empresas que visitamos”, aseguró, resaltando que este componente es fundamental en la estrategia de crecimiento industrial de Navarra. Con esta visión, y a través de la nueva Ley de Industria, Navarra aspira a seguir consolidándose como un referente en Europa, integrando las transiciones ecológica y digital como pilares fundamentales de su futuro industrial.

La intervención de Mikel Irujo dejó claro que, en este momento de transición, Navarra no solo sigue apostando por su industria, sino que lo hace con la convicción de que la calidad, la sostenibilidad y la innovación son las claves para competir en un mundo cada vez más globalizado.